Tokio,.- Veintiocho ediciones de los Juegos Olímpicos y 125 años de historia dan para muchas anécdotas. Algunas resultan tan insólitas que parecen mentira; pero todas ocurrieron de verdad.
En el equipo de esgrima de Australia que participo en Los Ángeles 1932 figuraba un tirador que después sería famoso, pero no en el deporte sino en el cine americano. Errol Flynn protagonizó numerosas películas de aventuras en las que exhibió su habilidad con la espada.
Los Juegos de Londres 1948, los primeros después de la II Guerra Mundial, se organizaron con tanta austeridad que llegaron a escasear los alimentos para los deportistas.
Los problemas se solucionaron finalmente gracias al envío diario de comida desde Estados Unidos y a las toneladas de pasta que aportó Italia. Los participantes fueron acomodados en barracones de la Royal Air Force.
Estados Unidos y la Unión Soviética se enfrentaron en la final de baloncesto de los Juegos de Helsinki 1952. La táctica de congelar el balón -no existían todavía los 10 segundos de retención máxima en campo propio- llevó a que a los 10 minutos de partido el marcador señalase un raquítico 4-2 a favor de EE.UU.
En el segundo tiempo del choque, que ganaron los americanos por 36-25, un jugador soviético se cansó de esperar a que sus rivales cruzasen el campo y se tumbó en la pista a descansar. .
Cinco meses y medio duraron los Juegos de París 1900, que coincidieron con la extensión de la Exposición Universal. Comenzaron el 14 de mayo y terminaron el 28 de octubre.