CIUDAD DEL VATICANO.-El papa Francisco aceptó este martes la dimisión de un obispo irlandés, William Lee, que en 2010 lamentó no haber reaccionado con más firmeza con un sacerdote pederasta.
La renuncia de Lee, obispo de la diócesis de Waterford y Lismore, fue aceptada en virtud del párrafo 2 del artículo 401 del código de derecho canónico que contiene las revocaciones por falta grave o enfermedad, indicó la Santa Sede.
Según fuentes del Vaticano, el obispo tiene cáncer, por lo que pidió al papa su retiro. Según la prensa británica, el obispo habría pedido disculpas en 2010 por hechos que tuvieron lugar en los años 1990.
Lee, alertado por las víctimas de un cura pederasta, lo cambió de puesto dentro de su propia diócesis pero tardó dos años en avisar a la policía, según la misma fuente. En 1996, tras haber recibido otras denuncias, destituyó al cura de todas sus funciones.
«Ninguna palabra de disculpa, ningún gesto de arrepentimiento podrá compensar el enorme daño causado y el sufrimiento padecido», reconoció el obispo ante las víctimas.
Lee reconoció en 1996 que antes de la creación de la comisión para la protección de los niños en la Iglesia católica, los casos de pedofilia habían sido muy mal manejados. La iglesia católica irlandesa es una de las más afectadas por el escándalo de los abusos sexuales a menores por parte de curas y religiosos, por casos que tuvieron lugar mayoritariamente en los años 1970.