SANTO DOMINGO.-“Yo me siento asustada porque sin ese medicamento yo no puedo llevar mi vida cotidiana”, son las palabras de Gregoria Moreno, una de las tantas mujeres en República Dominicana que padecen de Lupus y que toman hidroxicloroquina mejor conocido como plaquinol para combatirla.
El miedo a sufrir crisis y hasta perder la vida por la falta del medicamento se hizo mayor en la mujer de 57 años desde hace un mes, cuando inició los escasez, luego de que el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, dijera que podría ser la cura al coronavirus.
Para ella la situación es difícil porque su medicina es de uso continuo, actualmente le quedan 15 pastillas de las 30 que le cedió una amiga.
Previo a la falta del plaquinol en el país las personas la adquirían de forma habitual en las farmacias y costaban 2, 700 pesos por 20 pastillas.
Para Gregoria Moreno es de vital importancia que el Ministerio de Salud Pública tenga medicamentos para todos.
De su lado, Georgina Olivo siente miedo de recaer en los dolores en el cuerpo, no poder levantarse de su cama o no poder sostener un paño por el dolor en las manos y fiebre, padecimientos que le produce la enfermedad mixta del tejido conectivo y que combate con la hidroxicloroquina .
“Tengo semanas llamando a las farmacias, no me quedan muchas pastillas y yo me tomo una diario, cada caja trae 20. Ahora tengo miedo de volver a recaer”, expresó la joven de 21 años, quien fue diagnosticada hace un año con enfermedad mixta del tejido conectivo.
Olivo narró como un día en la farmacia vio como una persona compraba una caja completa de plaquinol ¨acabando con todo el medicamento que había en el lugar hasta el momento¨.
Igualmente atemorizada se siente Tanay García, quien padece de lupus eritematoso sistémico desde hace tres años y toma la hidroxicloroquina de por vida.
La joven de 24 adquiría el medicamento en farmacias grandes y pasó de tomarlo diariamente a interdiario (un día si y uno no) para poder mantener la estabilidad en su cuerpo y no hacer crisis.
Con respecto a la escasez de este medicamento, el presidente de la Unión de Farmacias INC, Raúl Hernández, señala que al parecer en el país hay una gran cantidad de personas que compraron el medicamento para guardarlo.
“Lamentablemente los distribuidores que traen esa medicina al país no pueden suplir a los pacientes de lupus y reumatoides que compraban el medicamento”, lamentó Hernández.