Nos hemos motivado a escribir sobre esta materia, porque nos quedamos sorprendidos con el titulo hecho en Areito en la columna Cápsulas Genealógicas, que reza “Origen franco-haitiano de apellidos dominicanos” escrito por Leonardo Díaz Jáquez del Instituto Dominicano de Genealogía.
Por cierto, aprovechamos para invitar a leerlas todos los sábados con detenimiento y admiración, como nosotros lo hacemos, este valioso esfuerzo hecho por nuestros genealogistas en el matutino hermano Hoy.
Continuando con lo primero, al ver este titular, que no corresponde con la realidad, aunque las conclusiones del mismo lo dejaran entrever, no es así. Los apellidos franceses en el país no vienen de Haití, provienen de Francia; por supuesto, debido a la naturaleza de nuestra isla, sin frontera física, y apenas una frontera jurídica que quieren derribar, hay apellidos que si son haitianos como Pepén, Lachapelle, naturales de Mirebalais ubicado esta ciudad a 60 kilómetros en las afueras o al nordeste de Puerto Príncipe, capital de la República de Haití, y zona estratégica aprovechada como antesala del ejército haitiano para sus ataques militares en territorio dominicano.
Pero hay apellidos como los Dumé, Espaillat, Grateró, Saint-Hilaire, que son de los franceses o colonos franceses que se asentaron en la parte española de isla, por diversas razones, estableciendo arraigo de este lado.
Al ponerlo así, como se nombró, da la impresión que todos los apellidos sonoros a francés, vienen del pueblo haitiano, y esto no se puede dejar en el aire de esa forma.
Cuando buscamos la versión digital del mismo artículo en la pagina del Instituto Dominicano de Genealogía (IDG), el autor no se atrevió a titular eso, sino que lo tituló como es la realidad, “SOBRE EL ORIGEN FRANCÉS DE APELLIDOS DOMINICANOS”, lo que evidencia una mala intencionada interpretación del texto o una muy marcada intención de decir lo que no es y querer expresar que no están de acuerdo con la Sentencia 168-13.
A quien tituló así, le digo que No hay que falsear títulos para expresar un parecer, hay que tener cuidado con eso y explico a continuación.
En el mismo escrito de Leonardo Díaz explica, muy bien, que no es verdad que los progenitores de los apellidos dominicanos de origen francés devienen de la tropa francesa del general Leclerc que vinieron a la isla de Santo Domingo para 1802, sino que estaban desde antes, no importa si eran “franceses blancos, mulatos o negros.”
Esto nos llevó a repesar y auscultar en los libros de historia de diversos autores y de las mismas Capsulas que las colecciono de manera muy personal.
Samuel Hazard, en su libro Santo Domingo Pasado y Presente, explica el origen de los franceses en la isla, los cuales vinieron a Samaná a principios o en la primera mitad de 1600, se enmarca 1640, desde la isla de San Cristóbal, debido a su expertiz en naves o barcos de mar navegando por las islas cercanas y huyendo a las ordenes del Gobierno español que envió a Federico de Toledo, quien tenía una gran escuadra (Conjunto de buques de guerra) para destruir la colonia anglofrancesa de San Cristobal. Esta isla era compartida por los ingleses y franceses en detrimento de los aborígenes de esta pequeña isla.
Extraigo del libro de Hazard: “… los franceses hacían sus grandes navíos de una madera especial, con los que navegaban por las islas cercanas, llegando tan lejos como a desembarcar en las costas de Santo Domingo, particularmente en la zona norte, cuyo ganado salvaje les tentó. Así se establecieron en pequeños grupos desde Samaná a Tortuga”.
Continuaremos con una segunda parte.
@RamonLoraR