Santo Domingo.- Los implicados en la Operación Medusa, eliminaron principales fuentes de información de la Procuraduría General de la República, para que no quedaran evidencias de los hechos que habían cometido en áreas como Extradiciones, Bienes Incautados y Antecedentes Penales; según el expediente acusatorio del Ministerio Público.
Las evidencias fueron destruidas en un operativo de trituración e incineración de documentos de la PGR sin dejar acta ni constancia del proceso.
De igual modo, los implicados en el Caso Medusa, «utilizaron programas informáticos para espiar empleados de la institución, en franca violación de sus derechos fundamentales».
Asimismo, enviaron e interceptaron comunicaciones de empleados y cientos de ciudadanos, mediante una maquinaria de espionaje con fines de intimidar extorsionar y de obtener informaciones privilegiadas.
De igual manera, el documento indica que la institución fiscalizadora era utilizada «para recibir dinero de soborno en bultos».
Los acusados del caso son Jean Alain Rodríguez, Jonnathan Joel Rodríguez Imbert, Alfredo Alexander Solano Augusto, Altagracia Guillén Calzado, Jenny Marte Peña, Javier Alejandro Forteza Ibarra, Rafael Antonio Mercedes Marte y Miguel José Moya.