Joan Vargas 
Alejandro Rafael Pérez Pérez y Clarisa Andreina Mosquea Eduardo fueron detenidos en los allanamientos
SANTO DOMINGO.- Dos personas fueron apresadas durante los allanamientos que realizaron este jueves unidades de la DNCD en compañía del Ministerio Público en Moca y otras ciudades de la región Norte del país, como parte de la operación Falcón.
Los detenidos fueron identificados como Alejandro Rafael Pérez Pérez y Clarisa Andreina Mosquea Eduardo, padrastro y hermana de Erick Randhiel Mosquea Polanco, cabecilla de la red de narcotraficantes y lavado de activos desarticulada a principio de mes durante la Operación Falcón .
Una fuente confirmó a El Día que los allanamientos forman parte de las pesquisas para dar con el paradero de Erick Randhiel Mosquea Polanco y otros miembros de la red.
La red del crimen organizado desmantelada durante la Operación Falcón, que operaba principalmente desde Santiago, llegó a acumular inversiones del lavado de activos por al menos 10,000 millones de pesos. Esta red para el 2012 ya traficaba hasta 2,500 kilos de cocaína a la semana, según el Ministerio Público.
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Según estimaciones de las autoridades nacionales e internacionales, los miembros de la red lavaron cuantiosas sumas de dinero y “traficaron cientos de miles de kilos de drogas hacia Europa, Estados Unidos y Puerto Rico, y movilizando más de 500 millones de dólares producto de esa actividad criminal”. Así consta en expediente depositado por el fiscal de Santiago, Osvaldo Bonilla Hiraldo, en la solicitud de medida de coerción contra los imputados que apresaron durante el operativo.
Uno de los allanamientos realizados hoy Moca.
Las informaciones preliminares del Ministerio Público apuntan a que la red de narcotráfico operaba incluso antes de 2012 y que existen evidencias de que a partir de 2017 incrementó sus operaciones.
“Entre República Dominicana y Puerto Rico se le decomisaron aproximadamente 8,500 kilos de cocaína, lo que evidencia el clima de impunidad en el que desempeñaban sus operaciones delictivas”, dice la solicitud de coerción.
La operación, que continúa realizando allanamientos y mantiene una investigación abierta, es encabezada por la Dirección Nacional de Persecución de la Procuraduría General de la República y la Fiscalía de Santiago.
