Awilda Cuello 
Hugo Beras y demás implicados cuando salían de la sala de audiencias. Guillermo Burgos.
SANTO DOMINGO.-El exdirector del Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (INTRANT), Hugo Beras, junto a José Ángel Gómez Canaán (Jochi), propietario de la empresa Aurix SAS, y los demás implicados en el caso «Camaleón», crearon una compleja red de espionaje satelital y realizaron extracciones ilegales de información telefónica.
Así consta en la solicitud de medidas de coerción presentadas por el Ministerio Público contra los acusados, la cual también detalla que utilizaron drones estratégicamente ubicados en diversas zonas de la ciudad para realizar videovigilancia para uso ilícito.
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El documento señala que esta «red criminal» no solo atacó infraestructuras críticas del Estado, generando caos en el sistema de tránsito, sino que también adquirió bienes de alto valor, incluidos inmuebles y vehículos blindados.
En la solicitud de medida de coerción se destaca que los imputados habrían incurrido en lavado de activos derivados de sus actividades delictivas y se infiltraron en las investigaciones que se iniciaron para obstruir su avance.
Entre los implicados, además de Beras y Jochi, se encuentran Frank Díaz Warden, coordinador de Despacho y representante de Beras ante el Comité de Compras del INTRANT; Samuel Gregorio Baquero Sepúlveda, exdirector de tecnología del INTRANT; Pedro Vinicio Padovani Báez, exencargado del Centro de Control de Tráfico del INTRANT; Juan Francisco Álvarez Carbuccia, director administrativo y financiero del INTRANT y Carlos José Peguero Vargas.
Los imputados enfrentan cargos de pertenecer a una red de corrupción y crimen organizado dedicada al desfalco, estafa contra el Estado, falsificación, coalición de funcionarios, contrabando, comercio ilícito, sabotaje y terrorismo contra infraestructura crítica y robo de identidad.
