Naciones Unidas.- La salida del líder opositor venezolano Edmundo González el pasado fin de semana y su llegada a España como exiliado “claramente no es el fin de la crisis” en Venezuela, según dijo ayer el portavoz de la secretaría general de la ONU, Stéphane Dujarric.
De hecho, la ONU sigue estando “muy preocupada por la situación en Venezuela” tras la crisis desatada por las polémicas elecciones del pasado 28 de julio, y reclama a las autoridades “protección total de los derechos humanos”, dijo Dujarric en su rueda de prensa diaria.
El portavoz también se refirió al asedio sufrido por la Embajada de Argentina en Caracas, donde se encuentran refugiados seis líderes opositores -al parecer con restricciones de agua y electricidad-, y recordó el principio universal de inviolabilidad de las sedes diplomáticas y consulares.
“Debe respetarse en todo momento, en todos los casos y en todos los lugares del mundo”, recordó.