Paula Disla en una dinámica durante el seminario donde se reveló vulnerabilidad infnatil.
SANTO DOMINGO.-“Qué se ponga fin al maltrato, la explotación, la trata y todas las formas de violencia y tortura contra los niños y niñas”.
Con esa petición a nombre de la Coalición de ONGs de la Infancia de República Dominicana concluyó ayer el Seminario Internacional Los ODS en América Latina y el Caribe en la Era de Covid y su impacto en la infancia.
Hablando a nombre las 35 entidades participantes, Thomás Polanco, coordinador, dijo que el esfuerzo de “Tejiendo Redesinfancia” valió la pena porque quedó claro que es de obligatoriedad el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible por parte de los gobiernos de América Latina y el Caribe, y en especial de República Dominicana.
Thomás Polanco y Paula Disla junto a otros expositores evento.
Estos promueven las capacidades y oportunidades para que que se garanticen los derechos y calidad de una vida digna de las niñas, niños y adolescentes.
Protección
En la ponencia central de ayer, Paula Disla, presidente ejecutiva del Consejo Nacional de la Niñez y la Adolescencia, narró parte de las dificultades vividas por la infancia tras la aparición del coronavirus.
Reconoció que la otra pandemia agigantada fue que creció el abuso infantil, que el confinamiento contribuyó a las uniones tempranas, a que se aumentara el maltrato, la violencia, la explotación infantil e incremento de la pobreza, especialmente para los que quedaron en orfandad, entre otros factores negativos.
Igual citó que la falta de acceso a los servicios básicos como agua, salud, educación y de conectividad acrecentó la brecha socioeconómica enel desarrollo infantil. No obstante, esas experiencias han de contribuir a impulsar medidas a favor de la niñez.
José Sergio Abreu, coordinador de la Agenda del Ministerio Ambiente al referirse al ODS 13 insistió allí que se cumpla la Agenda 2030 de cara a la infancia, porque el tema del cambio climático impacta en todos los aspectos a la niñez.
