El torpedero dominicano Oneil Cruz, de los Piratas, debutó este lunes.
WASHINGTON.- El infielder dominicano Oneil Cruz pegó su primer cuadrangular de la temporada en la derrota de los Piratas por 3-2 ante los Nacionales, y el tablazo no pudo ser más típico del talento del quisqueyano: Una línea a 109.8 millas por hora que se voló la barda en más o menos dos segundos.
Mientras trotaba por las bases, Cruz hizo un gesto como mirando un reloj en su muñeca, que es la celebración que creó en su paso por ligas menores. Evidentemente esta fue la hora en que Cruz brilló.
“Fue impresionante”, señaló el derecho venezolano Miguel Yajure, quien lanzó cuatro entradas en blanco por los Bucaneros. “Parecía que no se iba, y simplemente se desapareció”.
Cruz no pensó que la pelota se iba a saltar la cerca debido al bajo ángulo de salida (19 grados). Salió corriendo con rapidez de la caja de bateo, mentalmente preparado para llegar a la segunda base en una línea que daría contra el muro. Después de casi dos segundos, Cruz pisó el freno y pasó a un trote antes de mirar su Rolex imaginario.
“Pensé que iba a dar contra la cerca y simplemente siguió volando”, describió el dirigente del club de Pittsburgh, Derek Shelton. “Este muchacho tiene un poder increíble. Le da a la bola tan duro. Pensé que sería un doble, y sólo siguió”.
Igual de impresionante a la velocidad o al ángulo de salida fue dónde se localizó el pitcheo que castigó. La recta de Erick Fedde en una cuenta de 3-1 fue arriba y afuera. La mayoría de los bateadores zurdos hubieran conectado una suave rodada si hubieran tratado de halar ese lanzamiento. Cruz, un campocorto con 6-7 de estatura y un alcance de sus brazos igual de amplio, no es como la mayoría de los bateadores zurdos. Shelton destaca la capacidad que Cruz tiene para emplear su estatura para crear equilibrio.
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“La extensión en la parte delantera, debido a que es tan grande y ligero, es algo que verdaderamente sobresale”, explicó Shelton.
Cruz, por supuesto, está acostumbrado a sobresalir.
Desde el punto de vista de la producción, Cruz todavía sigue aclimatándose al nivel de Grandes Ligas. Aun con el jonrón, Cruz tiene una línea de bateo de .250/.250/.438 con wRC+ de 88. A pesar de ello, el quisqueyano no ha perdido tiempo en su anhelo de seguir aprendiendo.
En su primer juego de esta campaña, Cruz exhibió todas sus cinco herramientas. Su doblete para vaciar las bases que salió a una velocidad de 112.9 millas por hora fue el batazo más duro conectado por un jugador de los Piratas en toda la temporada. También registró tres de las mejores velocidades de sprint (31.5, 30.7, 30.3 pies por segundo) para un miembro de los Piratas esta campaña. Y para ponerle la cereza al pastel, realizó el tiro más fuerte por parte de un infielder esta temporada, un disparo de 96.7 millas por hora, para retirar al venezolano Willson Contreras en la inicial.
Fuente: MLB.com
