SANTO DOMINGO.-Algunas de las razones por la que el periodista Olivo de León renunció al cargo de director de Relaciones Públicas del Ministerio de Salud Pública con efectividad al día de hoy, es porque nunca fue recibido en el despacho del ministro para establecer la base de su trabajo.
“El ministro parece que no sabe bien hacia donde quiere conducir su barco y en mes y medio que tenemos aquí, todavía no hemos tenido oportunidad de despachar con él, si usted no puede despachar con su jefe para resolver los problemas cotidianos y recibir y dar la orientación necesaria es muy difícil realizar un trabajo eficiente”, explicó De León a EL DÍA.
El ambiente de trabajo según cuenta se tornó difícil y estuvo caracterizado por improvisaciones constantes y dijo que cuando planeaba proyectos creativos era relegado a un segundo plano.
La permanente intervención de diversos asesores de comunicación, cuenta De León, tanto de la Vicepresidencia, como del Centro de Información y Comunicación del Gobierno (Dicom) le impedía ejecutar una labor fluida y dinámica en su función.
Por otro lado, afirmó que hace dos semanas escucho ciertos comentarios referentes a la diputación de sus funciones desde los entornos de prensa de la vicepresidencia de la República.
“Por eso ahora voy a dejar el camino libre para que designen a quien mejor le parezca en el puesto”, manifestó De León.
