Santo Domingo.-El nuncio de Su Santidad, monseñor Jude Thaddeus Okolo, consideró ayer que la fe de otras personas no puede ser criticada, porque “es una realidad honda, personal, misteriosa y sin explicación sencilla”, donde se junta la libertad humana y la gracia divina para desbordar toda lógica.
“A veces se critica la fe de cualquiera, y ¿cómo podemos criticar la fe de otras personas? No hay dos personas que tengan la misma fe, cada uno es un individuo y en esa individualidad es que Dios va a juzgarnos”, señaló el nuncio apostólico.
Consideró que el ejercicio de la fe requiere la libertad que conlleva la responsabilidad humana, porque solo los ángeles han sido creados puros por naturaleza, pero los hombres no; “y si llegamos a la perfección es por mérito”.
Al oficiar la misa de Resurrección, celebrada en la Catedral Primada de América, el representante del Papa en el país instó a los cristianos a encontrar a Jesús en todo lugar, “no solo en la iglesia”, porque para encontrar la fe hay que abrirse y tener una experiencia personal con Dios.
Dijo que con la resurrección Dios invita a cada persona a tener una relación personal con él, y tocar su misericordia. Explicó que la resurrección es un caso de fe, no es cuestión de pruebas físicas, lógicas o metafísicas, y que Jesús quería que fuera así, porque cuando las personas llegan a una experiencia profunda de Dios, sobran las señales externas.
Advirtió que si los hombres no pueden mostrar a Jesús resucitado en su rostro, a los que tienen dificultades y pruebas, su fe no tiene sentido. “Ya no vale la pena el sepulcro vacío, porque Jesús está vivo”, dijo.