J. Osiris Mota
Suena el tiro, y salen veloz los corredores, solo que en este caso ya venían corriendo cuando la JCE autoriza a los partidos la realización de sus primarias para escoger sus candidatos para las próximas elecciones.
Es simplemente un formalismo legal, ya que hace varios meses, muchos de los precandidatos ya estaban en plena compaña. Una muestra de que los primeros que no respetan las leyes son los que se supone van a las direcciones del Estado a someterse a ellas, hacerla cumplir, además de administrar sus recursos.
Los candidatos no dan aún sus ideas, sus proyectos, a que quieren ir al gobierno. Si algunos tienen sus propuestas para el electorado, a estas alturas, no conocemos un planteamiento con sentido que se haya hecho en un programa de radios o TV o en las redes sociales como les gusta a muchos en esta era del espectáculo. Y no ha sido por falta de tiempo u oportunidad, es lo que más tenemos en esta época.
Estamos ante una sociedad con muchos problemas y deficiencias, que entendemos deben ser la preocupación de sus políticos, para presentar a sus votantes soluciones a sus males. Pero, asimismo, la población de votantes no sabe encarar dichos males y exigir de sus aspirantes, como van a resolverles sus problemas que martiriza la vida normal de las comunidades. Mas fácil piden individualmente prebendas o simplemente la solución de un día de hambre o borrachera.
Tal vez escuchemos a diferentes líderes, hablar de los males que aquejan a la sociedad y acusar al gobierno de turno de no tener la calidad ni la capacidad de resolver, y ofrecer su solución tan pronto logren el favor de los votantes, pero no así, presentar proyectos que puedan sentarse a discutir con los afectados, donde puedan hacer sus evaluaciones, sus diferentes alternativas y los recursos con los cuales cuentan. O, mejor dicho, hacer un análisis FODA, como haríamos en administración. Definir nuestras fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas.
Son muchos los males que durante décadas nos martirizan y vienen y van políticos y demagogos sin que veamos los proyectos para corregirlos definitivamente, mas que no sean, discursos altisonantes, populistas ofreciendo el cielo y las estrellas sin nada concreto, y con esto vienen engañando los votantes incultos que hemos enseñado a valorar solo sus intereses particulares en un entorno de hambre y mal vivir, que creen que con solo migajas son recompensados.
Seguimos arrastrando una pésima educación aún después de todos los recursos aportados. Salud no ve superar sus deficiencias, y nadie plantea un buen proyecto de salud preventiva para evitar las enfermedades.
Se gastan mas de 70 mil millones de pesos cada año por accidentes de tránsitos, donde quedan más de 25 mil personas minusválidas, agravando el círculo de pobreza de miles de hogares, y no vemos un solo planteamiento con sentido de parte de nuestros candidatos.
Ojalá que este año, los políticos entiendan que deben estudiar, conocer, palpar los problemas que están aquejando la sociedad, y presenten sus proyectos, los divulguen, discutan y escuchen los puntos de vistas de las comunidades, y las hagan parte de la solución. Necesitamos políticos con nueva visión participativa, dispuesto a sacrificarse con su gente, construyendo políticas sociales.
