Santo Domingo.-La participación de militares y policías en estructuras del narcotráfico se ha convertido en una práctica común en República Dominicana.
Desde alistados a oficiales superiores se han visto involucrados en estas redes, algunos, inclusive, han llegado a ser la cabeza principal de estas organizaciones delictivas.
El caso más reciente lo constituye el del coronel Johan Emilio Liriano Sánchez, a quien las autoridades vinculan a una peligrosa red de sicariato y narcotráfico que supuestamente operaba en la región Este del país, acusación que el ex oficial aún niega.
Pero éste es uno de los frecuentes episodios en los que sale a relucir que altos oficiales estarían dando apoyo a grupos del crimen organizado, cuando no es que ellos mismos encabezan esas estructuras.
En octubre de 2012 fue apresado el exjefe de operaciones de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) Francisco Antonio Hiraldo Guerrero, acusado de brindarles protección durante nueve años a grupos de traficantes para el traslado de grandes cargamentos de drogas.
Hiraldo Guerrero fue extraditado a los Estados Unidos para que responda a las acusaciones de narcotráfico en ese país.
Vinculada a ese mismo caso está la excapitana Raisa de la Cruz Olivares, acusada de apoyar narcotraficantes de la región Este del país a cambio de grandes cantidades de dinero.
La estrucutra del narcotraficante José David Figueroa Agosto también sacó a relucir la facilidad con que altos oficiales se vinculan con el crimen organizado, pues uno de sus lugar tenientes era el coronel, José Amado González y González, quien ocupó posiciones de mucha confianza en los mandos policiales.
Otro caso fue el del exmayor Miguel Rodríguez, entonces jefe de la Unidad Antinarcóticos de San Francisco de Macorís, detenido mientras supuestamente franqueaba de 400 kilos de cocaína en la autopista Duarte.
También militares fueron los ejecutores de la matanza de Paya, y dos exoficiales el teniente de navío Carlos Rossó Peña y el capitán de corbeta Miguel Suárez Silfa hasta usaban barcos de laMarina para operaciones de narcotráfico.