De aplicarse las debidas atenciones por los organismos competentes, el país tendría un tránsito vehicular más fluido . JOSÉ DE LEÓN
Santo Domingo.-El libre tránsito en la capital se ve afectado cada día, no sólo en horas pico, sino por el embotellamiento que provocan pequeñas averías en vías públicas, negocios mal ubicados y choferes. La solución de estos problemas no representa inversiones económicas cuantiosas sino medidas administrativas.
En un recorrido de periodistas de EL DÍA en diferentes calles y avenidas de la capital se confirmó que los tapones más significativos que se producen en vías concurridas se deben en gran medida a los factores señalados.
Una de las vías donde abundan los parqueos improvisados de vehículos, es en la calle Juan Erazo, en Villas Agrícolas, y sumado a ello se hallan las decenas de negocios que impiden el libre tránsito de los peatones.
También, los talleres y repuestos en la popular calle 20 de Villa Juana y en la avenida José Martí dirección Villa María, vehículos diseminados por las aceras, limitan el espacio con que cuentan los transportistas y transeúntes, obligando a personas a caminar en medio de la calle, arriesgándose.
Obstrucción vial reclama algunas soluciones administrativas simples»Ahí mismo, en calle Barahona, eso es un lío todos los días, la gente se mete en vía contraria y todo eso», explicó Manuel Urbáez, residente en la zona.
Uno de los lugares en que ocurren estos casos es en la avenida Hermanas Mirabal, de Villa Mella, frente a la estación Mamá Tingó; es común que en horas de la mañana motoristas la tomen vía contraria, dirección norte-sur, «como un atajo”.
Hoyos
Otra de las causas que producen filas kilométricas de vehículos son los famosos hoyos. En la avenida José Martí casi esquina 27 de febrero, (frente al Centro Infantil San Vicente de Paúl), entre los toques de bocinas, vendedores ambulantes y movimientos de los transeúntes se formó un fuerte taponamiento. Por un simple hoyo.
Choferes indecentes
Los episodios tipo saga «Rápido y Furioso» que se presentan, son las competencias que encabezan choferes de guaguas cuando ven a otro en la misma dirección que ellos, o que, al vencer el tiempo indicado por el control de la ruta para llegar al punto señalado, aceleran el vehículo, sin ninguna consideración, olvidando que llevan seres humanos.
Ramón A. Guzmán
— Declaración
“Tenemos una dirección de inteligencia que recorre el país, le damos instrucción al subdirector general de operaciones para que fiscalice, se traslade donde están los infractores, con miembros nuestros y tomen la medida y correctivos de lugar”.
Titular de la Digesett reacciona en defensa
Solución El director general de la Digesett, Ramón Antonio Guzmán Peralta, en una exclusiva para EL DÍA, dijo que tienen supervisores divididos por áreas y zonas del país, que desde que detectan las infracciones en la vía pública toman los correctivos de lugar, fiscalizan a los conductores mientras otros lo notifican vía comunicación.
Guzmán Peralta explicó que a veces son familias que no tienen parqueos en sus casas y utilizan las aceras para parquear sus vehículos, pero que los notifican y les dan un tiempo prudente para que retiren el vehículo, y si no lo hacen, lo mueven con una grúa de la Digesett a uno de los parqueos que tienen destinados para ello.