Santo Domingo.- La decisión del presidente Luis Abinader de cerrar la frontera terrestre, aérea y marítima con Haití fue “precipitada”, dijo este miércoles el obispo de la Diócesis de San Francisco de Macorís.

A juicio de monseñor Ramón Alfredo De La Cruz Baldera, la medida victimiza el pueblo haitiano, y «la gente siempre se coloca del lado de la víctima».

Consideró que el cierre de la frontera dominico-haitiana fue una señal de someterlos (a los haitianos) a la obediencia, ya que la construcción del canal para desviar aguas del río Masacre «fue un desafío».

Según el prelado católico, si el conflicto se lleva a una corte de arbitraje internacional República Dominicana llevaría las de perder.

“Es bien conocido que Haití tiene mejor cuerpo diplomático que República Dominicana”, acotó el obispo de la Diócesis de San Francisco de Macorís en el Programa El Día, que se trasmite por Telesistema Canal 11.

El líder religioso llamó al diálogo a las autoridades de ambas naciones y resaltó que en las negociaciones alguien debe ceder.

Expresó que una buena acción seria la reforestación de la frontera o realizar una presa entre ambas naciones para compartir el agua.

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Para monseñor Ramón Alfredo De La Cruz Baldera el conflicto actual por el cierre de la frontera abrirá los ojos y alzará la voz para que otras naciones acudan en ayuda de Haití.

Haitianos abandonan voluntariamente territorio dominicano.

Dijo que las naciones poderosas, como Canadá, Estados Unidos y Francia están mirando la crisis pero no les interesa en vista que en “Haití no hay grandes riquezas”.

El obispo de San Francisco de Macorís expresó su temor de que en la vecina isla se produzca una hambruna tan grande que ellos (los haitianos) tengan que venir a República Dominicana en poblada. “Sí eso se da, ¿Qué  hacer? «Los militares les disiparán».

Alfredo De La Cruz Baldera mostró su apoyo al  presidente Abinader, de insistir en foros internacionales para que las naciones acudan en apoyo de Haití, lo que significa cuidar la seguridad dominicana.

Sínodo 2023

Del 4 al 29 octubre de 2023 y en octubre de 2024 se celebrará en el Vaticano la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos, titulada ‘Por una Iglesia sinodal: comunión, participación y misión’. Un evento convocado por el papa Francisco e histórico por la cantidad de novedades en fondo y forma que se han introducido.

Monseñor Ramón Alfredo de la Cruz Baldera, Obispo de San Francisco de Macorís participará como representante de la Conferencia del Episcopado Dominicano (CED).

El evento religioso  tiene como novedad que el 25 por ciento de los participantes serán laicos y tendrán derecho a voto.

“El Sínodo es un encuentro de obispos para discutir temas de la actualidad, donde la iglesia tiene que responder a casos concretos”, explicó el religioso.

Resaltó que esta edición pretende responder las inquietudes del día de hoy.

Calificó al Papa Francisco como un “renovador que está impulsando nueva vida y nuevo espíritu en la iglesia”.

Mujeres en la iglesia

Monseñor de la Cruz dijo además, que el papel de la mujer es uno de los temas a tratar en el sínodo, ya que es un tema al que el Papa Francisco le ha dado mucha importancia.

“Se va a reflexionar sobre el diaconado de las mujeres, el ministerio y el ministerio sacerdotal no solo de la mujer sino de todos los bautizados”, destacó.

Apuntó que se tocará con “ahínco y bastante seriedad” el tema de los abusos sexuales dentro de la iglesia.

“Este es un tema que el Papa lo ha tratado abiertamente y la iglesia lo está enfrentado de manera radical”.

El obispo de San Francisco de Macorís explicó, que cada país realizó consultas tanto a laicos, religiosos e incluso con no creyentes que por primera vez tendrán participación.

Papa Francisco.

Explicó que la visón del papa Francisco es “que tenemos que escuchar a todos, porque todos son importantes”.

Acotó que esa es la nueva imagen de la iglesia donde todos podemos participar, aún los que no son creyente fervientes, pero que quieren aportar “todos somos necesario”.

Imagen de la iglesia

El Obispo dijo que todos los cambios que se están dando dentro de la organización de la iglesia católica, tienen ver con atraer una nueva generación.

“No somos ingenuos, sabemos que ha habido una pérdida de credibilidad en la iglesia por las situaciones que se han presentado a nivel mundial”, expresó.

Explicó que todas las situaciones y denuncias serán tratadas, sin embargo aclaró que esta primera etapa del sínodo será para analizar, no para tomar decisiones y el “Espíritu Santo será quien irá guiando cuales medidas tomar”.

Celibato y matrimonio del mismo sexo

Al ser cuestionado sobre el celibato y el matrimonio entre personas de un mismo sexo, el obispo de San Francisco de Macorís recordó que el primero no fue una práctica desde los inicios de la iglesia, sino que era opcional, y luego se puso como algo obligatorio.

En cuanto al matrimonio igualitario, dijo que para tratar el tema dentro de la iglesia se debe tocar la doctrina del templo y el derecho canónico.

Reconoció que “estamos preparados para tocar el tema, no para tomar decisiones”, sin embargo aclaró que es importante que son puntos que ya se tocan dentro de la iglesia,  cosa que no se hacía antes.

Dijo que anteriormente era impensable que esos temas fueran tocados por la iglesia, y reconoció que pese a que hoy son tratados hay personas que se “escandalizan”.