Elías Brache
Sin duda han sido días intensos, la tan esperada acometida judicial contra la corrupción ha iniciado su ofensiva y desde ya se esgrimen argumentos para desmeritarla, se hace necesario recordar cuál es el escenario y quiénes son los actores.
Al frente del Ministerio Público está la procuradora general de la república, magistrada Miriam Germán Brito, una magistrada de carrera, respetada por la sociedad, acompañada de un equipo de fiscales que no han sido cuestionados.
En la acera opuesta, el primer caso que nos ocupa como sociedad es la llamada “operación antipulpo”, nombre este dado por las profundas ramificaciones que tenía en su accionar Alexis Medina, acusado de ser cabecilla de un entramado mafioso. Alexis, desde hace mucho tiempo era señalado como una persona, que siendo hermano del presidente Danilo Medina, se había aprovechado de esa condición para hacer negocios ventajosos con el estado.
Junto a Alexis Medina está detenida su hermana Carmen, el exministro de Salud Pública, Freddy Hidalgo; el exdirector de la OISOE, Francisco Pagan; el expresidente del FONPER, Fernando Rosa, y el excontralor, Rafael Germosén, entre otros.
En los allanamientos practicados se decomisó en efectivo un total que supera los 60 millones de pesos.
Los implicados se presumen inocentes hasta prueba en contrario.
Una vez apresados, el Partido de la Liberación Dominicana ha salido en su defensa, y como es lógico, celebró una rueda de prensa.
Detallar los asistentes a la rueda de prensa sería algo como redactar el álbum de la corrupción, que curiosamente el PLD distribuía en los tiempos que ser monje y miembro del PLD era equivalente; así que nos enfocaremos en solo cuatro asistentes.
Francisco Domínguez Brito, quien fungió de vocero y quien tiempo atrás se vendía con un spot televisivo quemando una gorra del Partido de la Liberación Dominicana mientras proclamaba que había, y cito: “que hacer polvo de lo que no sirve y cenizas de todo lo corrupto”.
Luego, tomó la palabra el Presidente Danilo Medina, quien encabezaba el gobierno dominicano cuando la oficina de sobornos de la multinacional Odebrecth se instaló y operó en República Dominicana.
Finalizadas sus palabras, fue auxiliado al sentarse por el general Adam Cáceres, exjefe de la guardia presidencial, quien figura como socio junto a una pastora evangélica, en una serie de proyectos que han sido cuestionados en reportajes de la prestigiosa periodista Nuria Piera.
Entre los asistentes estaba también el exministro de Obras Públicas y excandidato presidencial del PLD, Gonzalo Castillo, quien ha sido señalado como parte de una red corrupta vinculada al negocio de asfaltado y varias diabluras más.
Por supuesto, hay otros actores que han tenido pequeñas apariciones, uno de ellos el secretario de asuntos jurídicos del PLD, José Dantes Díaz, quien se quejó de que los imputados no saben de qué se les acusa. A su vez, ese José Dantes aun no explica cómo era delegado político del PLD ante la Junta Central Electoral y a la vez cobraba en dólares como ministro consejero de la Embajada Dominicana en Ecuador.
Otra pequeña intervención fue la de la excongresista Lucia Medina, hermana también del presidente Medina, y quien recibió en su fundación millones de pesos del FONPER, institución de la cual su hermana Carmen ya apresada era funcionaria, según detalla el expediente acusatorio.
Esta fue a visitar a sus familiares presos, se le hizo unas preguntas pero no habló…
Hasta aquí algunos de los actores del primer capítulo de lo que se vislumbra será un gran éxito de pantalla: “La mafia morada”, ya veremos cómo continúa la serie.
