La Paz.- El Gobierno boliviano oficializó ayer, a través de un decreto, la postergación del censo de población y vivienda para 2024, pese a las críticas que generó el anuncio en la región oriental de Santa Cruz, la mayor del país, que ha advertido con movilizarse contra el aplazamiento de la consulta.
El presidente boliviano, Luis Arce, y sus ministros firmaron un decreto que modifica otro, con el fin de que el censo, previsto inicialmente para noviembre se haga entre los meses de mayo y junio de 2024.