Paula Disla junto a sus hijos María Paula y José Rafael Hernández Disla.
Santo Domingo.-“Estoy segura que vamos a tener un futuro realmente brillante para la infancia, pues nuestros hijos se merecen vivir en un Estado que garantice su bienestar y felicidad”.
Con esta afirmación, Paula Disla se refiere a los resultados que tendrá el plan de prevención y protección a los derechos de los niños, niñas y adolescentes que se está implementando desde el Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia (Conani), porque su sueño, como madre y presidenta ejecutiva de esta entidad, es que todos los niños puedan tener una vida plena y feliz.
Vida de madre
Conocida por la caracterización del personaje infantil dominicano “María Moñito”, no es de extrañar que el vínculo de Paula con los niños sea fuerte, reforzado todavía más al convertirse en la madre de María Paula y José Rafael.
Asegura que su rol de madre es el primero en su vida. Con determinación afirma: “Mis hijos son para mí lo más importante entre las tantas cosas que tengo y que hago”.
Confiesa: “La llegada de María Paula marcó un cambio, un antes y un después, incluso en mis actividades profesionales. Entendí que llegó el momento de dedicarme a ella para que tuviera la mejor educación, vida y momentos de felicidad y alegría que solo la dedicación total de su madre puede dar”.
Sus embarazos y partos fueron momentos muy especiales. Nos cuenta que sus hijos fueron muy esperados, con mucho amor a su alrededor, “son personas muy preciadas y amadas, lo demuestran con su forma de ser, con su actitud y reciprocidad, como devuelven a la vida en gratitud y en alegría todo lo que se les ha dado”.
Disla afirma que, como madre, tiene muchas aristas. “Creo que mis hijos pudieran decir que soy una madre divertida, amorosa, tal vez muy práctica, como un librito claro”.
La crianza
Sobre la crianza de los hijos, asegura q ue deben ser educados con límites, atendido con conciencia sus derechos.
Expresa: “Mi casa es una casa divertida, donde se comparte y se participa en todas las decisiones desde que eran pequeños. Ahora que tienen 18 y 16 años, es un espacio de comunicación absoluta, de confianza, amor y entrega”.
Como madre, Paula se describe como una persona muy feliz y satisfecha de cada paso que ha dado con sus hijos, siempre consciente de que la labor de madre no se termina, pero “que las etapas que vamos pasando ayudan a revisar hacia donde vamos”.
Vida profesional
—Consultora
Es abogada. Consultora para diferentes organismos de cooperación en materia de niñez vulnerable, derechos de la niñez y adolescencia, valores, educación y primera infancia.
