Santo Domingo.-Desde que empezó hacer las rondas de presentaciones o “tryout” en 2009, a los 14 años, de las manos de Iván Noboa, el prospecto dominicano Nomar Mazara sobresalía por su talento especial.
Varios escuchas recuerdan que a esa edad nadie le daba tan duro a la bola como Nomar, quien finalmente fue firmado en julio de 2011 a los 16 años y medio por los Vigilantes de Texas, bajo un bono récord de cinco millones de dólares para un dominicano que todavía se mantiene.
Su peregrinar en los circuitos minoritarios fue muy corto, de apenas cuatro temporadas, en las que jugó en todos los circuitos.
Sigue historia
El pasado domingo Mazara, desde su llamada a las Mayores, hizo historia, a los 20 años de edad se convirtió en el jugador más joven en debutar este año, dejando atrás al relevista mexicano de Toronto Roberto Osuna, de 21 años.
Mazara fue convocado para sustituir al lesionado Shin-Soo Choo.
Luego coronó su actuación de bateando de hit en sus primeros tres turnos, incluyendo un jonrón frente al veterano Jered Weaver, de los Angels.
“Un debut memorable para el joven”, dijo el mánager Jeff Banister.
“Tres hits y un jonrón… es un día especial. Demostró gran equilibrio, entró en la primera entrada con gran confianza. Siempre tuvo su enfoque”. Mazara es el quinto jugador de los Vigilantes en conectar tres hits en su debut en las Grandes Ligas y el octavo en disparar un jonrón en su primer día en las Mayores.
“No sabía nada, sobre él realmente”, dijo Weaver. “No hay mucho acerca de él.
Él tiene clase en un swing largo, y tuvo un buen enfoque. Me tomó más de tres apariciones para averiguar sobre él.
Él descargó un par de hits, hizo un buen trabajo al mantener las manos atrás -nosotros todavía lo estamos llamando un buen bateador de bolas rápidas- debido a que no le pegó a un mal lanzamiento”, explicó Weaver, quien solo fue bateado por Mazara.
