“No podía ponerme a grabar con un celular, mientras ese hombre necesitaba ayuda”

“No podía ponerme a grabar con un celular, mientras ese hombre necesitaba ayuda”

“No podía ponerme a grabar con un celular, mientras ese hombre necesitaba ayuda”

David Soriano agarra el extintor con el que evitó que Concepción Polanco Melo sufriera daños peores tras incendiarse.

SANTO DOMINGO.-Deivi Solano llegó temprano al Palacio de Justicia de Ciudad Nueva a buscar una sentencia, pero cuando se acercaba a la puerta fue sorprendido por Concepción Polanco Melo, quien se roció combustible sobre su cuerpo y se prendió fuego.

La reacción instintiva de Solano fue correr hacia su vehículo a buscar un extintor para apagar el fuego que cubría el cuerpo del hombre que al sentirse arder empezaba a lanzar gritos de dolor.

David Soriano agarra el extintor con el que evitó que Concepción Polanco Melo sufriera daños peores tras incendiarse.

Mientras le rociaba la espuma para extinguir el fuego, Solano sintió que era visto por mucha gente que en vez de ayudarlo a salvar la vida de Polanco Melo se concentraban en sacar sus celulares para grabar o tomar fotos.

“¿Cómo podía yo ponerme a pensar en grabar si esa persona estaba necesitando ayuda urgente?”, se preguntaba el mismo Solano cuando habló con periodistas luego de que personal del sistema de emergencias 9-1-1 acudiera en auxilio.

También se quejó de la lenta reacción de los operadores que atendieron la llamada.
La rápida reacción de Solano evitó que Polanco se incendiara por completo y muriera, aunque quedó con quemaduras en gran parte de su cuerpo.

“Es un problema que estamos teniendo ahora de que la gente prefiere primero grabar y no acudir a dar la mano amiga. Era una persona que estaba sufriendo y si yo tenía la posibilidad de ayudarlo, no me iba a poner a grabar”, reitera Solano en forma de reflexión sobre lo que él define como una falencia de la sociedad actual.

Polanco Melo llegó sorpresivamente al Palacio de Justicia, donde hace meses ha llevado una denuncia sobre una supuesta trama orquestada por su expareja para mandarlo a matar y se queja de que las autoridades no le han hecho caso.

Esta vez rechazaron atenderlo porque no había acudido acompañado de abogados. Salió de las oficinas indignado, tomó un galón de gasolina, se lo roció en el cuerpo y ante la mirada atónica de todo el que estaba alrededor, se prendió fuego.

En la medida en que las llamas hacían efecto en su cuerpo aumentaban los gritos, logrando así llamar la atención de todos alrededor, pero segundos después ya solo reflejaba el dolor que le causaban las quemaduras.

Las unidades del 9-1-1 llegaron pasados unos 45 minutos después de que Polanco Melo iniciara su acción y de inmediato le prestaron auxilio para calmar el dolor, hidratar parte de su quemada piel, retirarle parte de la tela que se adhería a las heridas y luego lo llevaron al hospital.

Mientras llegaba la ambulancia, Deivi Melo lo había sentado en una silla y le daba agua, mientras el autoincendiario miraba como desconcertado y dolorido lo que pasaba en su entorno.

Personal de la Fiscalía reveló que, efectivamente, Polanco Melo desde 2016 ha estado acudiendo allí con la queja de que su expareja habría contratado sicarios para matarlo.

Un empleado del Ministerio Público que dijo haber visto al hombre en otras ocasiones, señaló que hay un certificado médico que indica sobre aparentes trastornos mentales, incluyendo delirios de persecución.

Cuadro sicológico

—1— Internamiento
El paciente fue llevado en una ambulancia del 9-1-1 al hospital Moscoso Puello.
—2— Patología
Un certificado médico indica que Polanco Melo sufre delirios de persecución.