Fiscal del Distrito Nacional, Rosalba Ramos
Santo Domingo.- Pese al 1% de posibilidades de que hombres agresores vuelvan a recaer en actos de violencia de género, ninguno ha sido parte de esa cifra, pues ninguno ha cometido un feminicidio.
La información fue ofrecida por la fiscal del Distrito Nacional, Rosalba Ramos, quien en base a las estadísticas de hombres que se han regenerado en el Centro de Intervención Conductual para Hombres del Distrito Nacional está de acuerdo con que sea reenfocada la estrategia hacia los agresores.
A la luz de los resultados que arroja el centro, la magistrada propone que la vista sea puesta en la conducta de los agresores en vez de que la campaña se trabaje solamente en función de las mujeres que experimentan algún tipo de violencia.
«El centro tiene más de una década, la recaída de volver reicindir en el delito es de un 1% y de todos los hombres que han pasado por ahí ninguno ha cometido feminicidio ninguno ha matado a su pareja o expareja», expresó Ramos.
«La óptica debe ser trabajar con los hombres desde el plano preventivo, trabajar con los niños, agregar materia en las escuelas o cátedras universidades para educar porque el cómplice más importante que tiene la violencia es el silencio», enfatizó la magistrada al participar en Los Coloquios de El Día.
Dijo que el problema en República Dominicana es que solo se enfoca en la violencia de género, pese a que el país tiene un problema de violencia a todos los niveles.
«Tenemos un problema de violencia a todos los niveles y necesitamos dar una respuesta en ese sentido porque la violencia afecta a las mujeres, pero también afecta a los niños», empero.
No obstante, explicó que «hay violencia de género porque no se ha concientizado de que no solamente es un problema de la Fiscalía porque ya cuando sucede el delito está y hay una historia detrás, es un asunto de educación».
La magistada abogó por la concientización en las escuelas sobre el tema de la violencia de género, pero tambien en la inversión para capacitación del personal que trabaja en la prevención y seguimientos de los casos de violencia.
