Ni la MLB ni el Dinnaf tienen moral para sancionar a Franco

Ni la MLB ni el Dinnaf tienen moral para sancionar a Franco

Ni la MLB ni el Dinnaf tienen moral para sancionar a Franco

Juan Mercado

Ni la Major League Baseball (MLB) ni la Dirección Nacional de Niños, Niñas, Adolescentes y Familia (Dinnaf) tienen moral para sancionar al jugador Wander Franco por supuestamente haber sostenido una relación inapropiada con una menor de edad.

La razón primordial es que tanto la MLB y como el Dinnaf tienen años haciéndose de la vista gorda en el abuso que se comete en la mayoría de las academias independientes que funcionan en el país para desarrollar niños que buscan convertirse en jugadores profesionales.

¿Acaso ignoran que esas academias están pobladas de niños de 9 a 12 años?, quienes tienen que someterse a un régimen de entrenamiento que no son propios para ellos, pero como las organizaciones de Grandes Ligas los quieren listos a los 13 y 14 años, en muchos casos incluyen hasta suministrarles esteroides para que alcancen el nivel exigido a la mayor brevedad posible.

Todavía el Dinnaf, que dirige Olga Diná Llaverías, no ha dado a conocer los detalles de la investigación sobre la muerte del prospecto Yerison Pimentel Franco en Santiago, a quien supuestamente le suministraron esteroides sin ninguna prescripción médica.

Lo más penoso es que el cadáver fue levantado dos días después, luego de permanecer en el pavimento de una transitada vía de Santiago, hasta que apareció un médico legista, para luego ser entregado a sus familiares de San Pedro de Macorís

En el caso de Franco, a quien no defiendo ni acuso, la situación podría complicarse y abrir una gran “caja de pandora”, ya que se crearía un efecto ‘dominó’, porque si se hacen investigaciones reales, especialmente en las comunidades del interior, son muchos los exjugadores y jugadores activos que podrían verse acusados por haberse involucrados con menores de edad.

Se sabe que cuando los peloteros están en el país son muy asediados por esas jovencitas, incluso en la mayoría de los casos sus padres apoyan esas relaciones. La falta de justicia hace que esos casos se multipliquen, para comprobarse, sólo vayan a las maternidades nacionales para vean la alta cantidad de menores embarazadas que asisten. ¡Eso parte el alma!