Desde mi circunstancia se me dificulta entender cómo cualquier persona medianamente inteligente que logre reunir mil dólares en efectivo los destine a emigrar ilegalmente en yola hacia Puerto Rico.
Hay incontables oportunidades para personas emprendedoras que dispongan de RD$60,000.00 en efectivo para comenzar algún negocito lucrativo.
El afán por emigrar lo alimentan percepciones de una pobreza mayor que la realmente existente y una penosa falta de fe en nuestro futuro.
Ambas desilusiones merecen combatirse. Pero también la industria del trasiego humano, muy ligado al narcotráfico. No se trata de yolitas de pescadores, pues en muchos viajes llevan mas de 50 personas, que representan casi tres millones de pesos sólo de pasaje, sin contar cualquier contrabando.
Es imposible operar esta ilegal explotación sin alguna complicidad de autoridades. Ojalá pueda atacarse con tanto éxito como contra el narcotráfico.