El último rinoceronte blanco del norte macho del mundo murió este lunes tras meses de enfermedad, dijeron sus cuidadores.
Sudán, como se llamaba el ejemplar, tenía 45 años y vivía en la reserva Ol Pejet, en Kenia.
Fue sacrificado el lunes después de que sus complicaciones relacionadas con la edad empeoraran considerablemente.
Su muerte deja solo dos rinocerontes hembras de su subespecie en el mundo: su hija y su nieta.
El rinoceronte, cuya edad era equivalente a los 90 años de los seres humanos, estaba siendo tratado por alteraciones degenerativas en sus músculos y huesos, sumado a amplias heridas en la piel.