Una agradable tuitera recordó que el 30 de noviembre de 1912 el arzobispo Nouel fue elegido presidente por el Congreso, para organizar elecciones tras el fracaso de los Quiquises.
Pocas semanas después lo tumbó Desiderio. Otra preguntó si tuvo hijos. No; vivió una castidad ejemplar.
Su papá Carlos Nouel se hizo cura tras enviudar; era nieto de Tomás Bobadilla. Mi tío abuelo el padre Pin Báez Gonzalez, sobrino suyo (que tuvo, reconoció y crío responsablemente a varios hijos) fue su secretario.
Nouel fue un hombre muy santo. ¿Y Meriño?, preguntaron. Son sus descendientes los Defilló, Logroño, Alsina, también embarazó una monja sobrina del padre Billini. Meriño fue cura macho, brillante pero de bragueta solícita.
Fue padrino de mi abuelo Tuto (1895-1960), hermano de Pin. Meriño tiene la más fastuosa tumba en la Catedral.
Su enemigo Buenaventura Báez (nieto del presbítero Sánchez Valverde), a quien difamó muchísimo, fue padre y tío de dos médicos que atendieron a Meriño. Báez está en la capilla al frente, con la más modesta y sencilla lápida… Meriño nació pobrísimo, Báez riquísimo. Id est quam ego cecini Twitter.