Bruselas.- Los ministros de Exteriores de la Unión Europea tratarán este lunes de desbloquear un nuevo tramo de ayuda del Fondo Europeo de Apoyo a la Paz (FEAP), destinado a cofinanciar parte del armamento que los países de la UE entregan a Ucrania.
Los ministros se reunirán para abordar el apoyo a Ucrania de cara a su contraofensiva contra Rusia, la misión comunitaria de formación de soldados ucranianos, el respaldo a través del FEAP, la rendición de cuentas de Rusia, el apoyo a una cumbre a mediados de julio sobre la iniciativa para la paz del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, o las próximas sanciones contra Moscú.
Los ministros intentarán llegar a un acuerdo político sobre el próximo tramo de ayuda para Ucrania del FEAP, del que la UE ya le ha asignado 3.600 millones de euros, pero deberán convencer al Gobierno húngaro, que ha anunciado que bloqueará el nuevo desembolso mientras Kiev mantenga en la lista de los patrocinadores internacionales de la guerra al mayor banco del país centroeuropeo, el OTP.
En opinión de un alto diplomático europeo, que apuntó a posibles intereses “económicos” húngaros, Budapest debería tratar el asunto bilateralmente con Ucrania sin poner en cuestión el apoyo que le está dando la UE para que prepare su contraofensiva.
En paralelo, se espera que el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, plantee a los ministros elevar el presupuesto global del fondo, que países como Hungría insisten en que tenga un carácter global y no se centre únicamente en Ucrania.
Tampoco hay acuerdo todavía entre los Veintisiete en el undécimo paquete de sanciones a Rusia propuesto por la Comisión Europea, que prevé penalizar a empresas de terceros países que contribuyen a que Moscú eluda las medidas restrictivas.
Fuentes diplomáticas señalaron que la UE no pretende replicar el modelo extraterritorial de Estados Unidos, pero sí consideraron que debería “ir más allá”, ya que “claramente hay numerosos actores internacionales que quieren ayudar a (Rusia) a eludir las sanciones y si queremos ser un actor geopolítico, necesitamos dotarnos de las herramientas”, dijeron. Un alto funcionario comunitario consideró que estas discusiones son las “típicas” que se dan entre los Veintisiete y confiaron en que se resuelva la situación.
“Estoy seguro de que tarde o temprano adoptaremos este undécimo paquete de sanciones y de que seguiremos adelante con nuestro apoyo militar a través del FEAP aumentándolo y adoptando un nuevo tramo de ayuda a Ucrania”, indicó.
Abierta está la convocatoria alemana de un desayuno de trabajo el lunes, previo al consejo, para avanzar en la iniciativa lanzada por una decena de países, entre ellos España, de que algunas decisiones de política exterior se puedan adoptar por mayoría cualificada, en vez de por unanimidad, aprovechando pasarelas contempladas en los tratados europeos u otros mecanismos puntuales.
Además de Ucrania, está previsto que los ministros aborden la situación en la región del Cuerno de África, donde la UE tiene intereses sobre la migración, la seguridad o el terrorismo.
Hablarán de Somalia y Etiopía pero fundamentalmente de Sudán, donde la UE tuvo que llevar a cabo una operación de repatriación de sus nacionales ante los combates entre el Ejército nacional y el grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR).
Otro momento destacado será el almuerzo de trabajo de los ministros europeos con sus homólogos de los países de los Balcanes Occidentales para hablar de lo que puede hacer la UE para apoyarles a hacer frente a las “interferencias de Rusia”, indicó un alto funcionario comunitario.
La UE es el primer socio comercial e inversor extranjero en esos países, con aspiraciones a entrar en la Unión. Igualmente, los titulares de Exteriores prevén dar luz verde a unas conclusiones sobre política de ciberdefensa y a un nuevo pacto que permita un despliegue más rápido de las misiones de la Política Común de Seguridad y Defensa, también en entornos complejos, algo previsto en la llamada “Brújula Estratégica”, el plan para dotar de más autonomía en defensa a la UE en la próxima década.
Los ministros podrían también respaldar la nueva ronda de sanciones que prepara la UE contra responsables iraníes por violar los derechos humanos, de acuerdo a diversas fuentes europeas.
El martes, toman el testigo los ministros de Defensa en otro consejo al que acudirá el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, y en el que seguirán abordando el apoyo militar a Ucrania, en especial los mecanismos a los que han dedicado 2.000 millones de euros para entregar ya munición de artillería a Kiev y realizar pedidos conjuntos para reponer arsenales europeos, una estrategia que desde Bruselas reconocen que le está costando “arrancar».