Decenas de personas fueron registradas este domingo al marchar en contra la nueva Constitución que promueve el presidente Jovenel Moise y en defensa de la actual Carta Magna de 1987, en Puerto Príncipe (Haití). EFE/Jean Marc Herve Abelard
Puerto Príncipe.- Miles de haitianos se manifestaron este domingo contra la nueva Constitución que promueve el presidente Jovenel Moise y en defensa de la actual carta magna, de 1987.
La manifestación, que transcurrió en su mayoría de forma pacífica, contaba con el apoyo de partidos de oposición y de varias congregaciones religiosas y es el primero de dos días de protestas convocados con motivo del 34 aniversario de la promulgación de la actual Constitución, que se celebra este lunes.
Numerosos manifestantes llevaban pancartas contra la «dictadura» que aseguran que quiere imponer Moise, otros ondeaban la bandera haitiana y algunos llevaban ramas de árboles, algo habitual en las protestas en Haití.
A lo largo del recorrido, la multitud creció y algunos manifestantes levantaron barricadas con neumáticos en llamas, pero no se registraron enfrentamientos con la Policía.
Los manifestantes quitaron carteles colocados en la calle por el Gobierno en las últimas semanas en los que se pide votar «sí» a la nueva Constitución impulsada por el presidente Moise en el referéndum previsto para el próximo mes de junio.
Moise impulsa la nueva Constitución por considerar que la actual ley fundamental es el origen de la crónica inestabilidad política que ha vivido Haití en las últimas décadas.
El proyecto de Constitución ha sido redactada por un grupo de expertos y ahora está abierta a discusión, pero la oposición se niega a participar en ese proceso.
La oposición considera que el mandato de Moise concluyó el 7 de febrero pasado y desde entonces no reconoce su autoridad como jefe de Estado.
El borrador de Constitución veta expresamente la posibilidad de que Moise opte a la reelección, algo que tampoco puede hacer bajo la actual legislación.
El Gobierno pretende celebrar el referéndum constitucional en junio y dos meses después, en septiembre, organizar elecciones legislativas y presidenciales