Higuey, La Altagracia.- Con corchones, sábanas y cobijas en el suelo, cientos de fervientes devotos y fieles seguidores de la fe mariana esperaron en los alrededores de la Basílica de Higuey para celebrar el Día de la Virgen de la Altagracia.
Estos fieles devotos que realizaron peregrinaciones desde diversos puntos del país hasta esta provincia, llevaban en sus manos flores, velones y crucifijos, con el fin de que la “madre espiritual y protectora" del pueblo dominicano les conceda sanidad, mejora económica y bienestar para sus familias.
Gladys García, quien acudió desde San Juan de la Maguana con sus esposo y amistades desde anoche a la provincia, expresó que acude a la basílica para darle las gracias a la Virgen de la Altagracia por haber cuidado de su familia durante todo el año pasado.
Asimismo, dijo que pedirá este nuevo año salud y bienestar para su familia, y paz social para la población debido a la ola de violencia que atraviesa la nación.
Juana Miguelina Javier, de 85 años, oriunda del municipio San Antonio de Guerra, indicó que este día trae consigo peticiones y oraciones de agradecimiento, ya que la madre protectora la salvó de la muerte.
“La semana pasada estaba sentada en un sofá y me paré y puse un clave eléctrico y miré el cuadro de la virgen y sentí que me impulsó y me quitó”, agradeció la señora que estaba acompañada de su hermana.
La devoción a la Virgen de La Altagracia tiene un profundo significado, pues representa la protección divina, la esperanza y el amor maternal de la Virgen María, quien es la madre de Jesucristo, Salvador de la humanidad.
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