Ciudad de Panamá. – República Dominicana figura entre los países de América Latina que han recibido mayor aporte fiscal de la comunidad migrante venezolana, según un informe de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
De acuerdo con el estudio, los millones de migrantes venezolanos que han salido de su país para establecerse en otras naciones de la región han contribuido de manera significativa a las economías de acogida, con un consumo acumulado superior a 10.600 millones de dólares anuales en ocho países analizados.
Entre estos se encuentra la República Dominicana, donde según el informe, la migración venezolana se caracteriza por un fuerte perfil emprendedor y de inversión. Además, sostiene que su aporte fiscal real asciende a 39,9 millones de dólares.
Asimismo, se destaca la inversión de capital venezolano, que ha movilizado cerca de 180 millones de dólares y ha generado más de 2.500 empleos directos a través de más de 50 empresas registradas.
En ese sentido, el estudio sostiene que el potencial de crecimiento fiscal es del 26,3 %, pudiendo alcanzar los 50,4 millones de dólares si se agilizan los procesos de regularización y se reduce la burocracia para la creación de nuevos negocios.
Por su parte, Colombia, principal país de acogida, registra las cifras más altas en volumen. La contribución fiscal de la población migrante venezolana ascendió en 2023 a 529,1 millones de dólares, lo que representa el 1,91 % de los ingresos tributarios de personas naturales, conforme a los datos del informe.
Su impacto en la economía real también es significativo. La comunidad migrante inyecta aproximadamente 3.000 millones de dólares anuales a través del consumo, una cifra comparable a más de la mitad de los ingresos de grandes conglomerados nacionales.
El estudio señala que, si se eliminaran las barreras para la inserción laboral formal y se aprovechara plenamente el capital humano —considerando que el 74 % está empleado, pero con altos niveles de informalidad—, el aporte fiscal podría escalar hasta 804,3 millones de dólares (el 2,90 % de los ingresos fiscales), lo que supondría un incremento potencial superior al 50 %.
La OIM también indicó que en Perú la contribución fiscal real se situó en 526,9 millones de dólares en 2024, equivalentes al 1,35 % de la recaudación total o al 0,23 % del PIB nacional. El consumo estimado de los migrantes alcanza los 2.400 millones de dólares, un monto comparable al 80 % del presupuesto anual del Ministerio del Interior.
No obstante, el país presenta una de las mayores brechas de oportunidad debido a la “degradación de habilidades”, ya que menos del 10 % de los profesionales venezolanos ejercen su carrera. De avanzarse en la convalidación de títulos y la formalización laboral, el ingreso fiscal podría aumentar un 51,3 %, alcanzando un potencial de 797,7 millones de dólares.
En Chile, la integración laboral se distingue por una alta tasa de empleo (89 %) y mayores niveles de formalidad en comparación con otros países de la región. Esto se traduce en una recaudación fiscal real de 409,7 millones de dólares, equivalente al 1,03 % de los ingresos fiscales totales.
El consumo de los hogares venezolanos en territorio chileno se estima en 2.400 millones de dólares, con una fuerte orientación hacia el pago de vivienda y servicios. El escenario potencial proyecta una recaudación de 510,1 millones de dólares si se optimiza la inclusión laboral.
“El fenómeno migratorio ha sido clave para contrarrestar el envejecimiento poblacional local, aportando una fuerza laboral joven y activa, con una edad promedio de 36 años”, afirma el estudio.
Panamá registra el impacto relativo más alto de la región. La contribución fiscal de los migrantes venezolanos asciende a 203,2 millones de dólares, lo que representa el 4,18 % de los ingresos fiscales totales y el 0,33 % del PIB.
Además, la inversión empresarial de origen venezolano ha sido un motor clave, con más de 1.800 millones de dólares invertidos en la última década y la generación de cerca de 40.000 empleos. Si se redujeran los costos de regularización y se facilitara el acceso al empleo formal, el aporte fiscal potencial podría aumentar hasta 283,2 millones de dólares, elevando su peso al 5,83 % de la recaudación nacional.
En Ecuador, pese a las barreras de regularización, la población venezolana aportó 46,9 millones de dólares al fisco (0,25 % de la recaudación total). El consumo local se estima en 876,2 millones de dólares, con un gasto concentrado en vivienda y alimentación.
El informe resalta que el aporte per cápita ha aumentado significativamente en los últimos años, pasando de 84 a 243 dólares, lo que evidencia una mayor capacidad contributiva a medida que la población migrante se asienta. En un escenario de plena integración, el aporte fiscal potencial ascendería a 55,9 millones de dólares.
Centroamérica y otras islas del Caribe
En Costa Rica, la contribución fiscal actual alcanza los 40,2 millones de dólares (0,32 % de los ingresos totales). El consumo de esta población inyecta aproximadamente 261,3 millones de dólares a la economía nacional, con una proporción significativa destinada a educación y salud, lo que refleja una inversión en capital humano a largo plazo.
El aporte potencial se estima en 47,5 millones de dólares. Un dato relevante es el alto nivel educativo de los migrantes venezolanos en el país: más del 40 % cuenta con formación universitaria, aunque este capital humano permanece subutilizado debido a barreras legales de contratación.
En Aruba, aunque las cifras absolutas son menores debido al tamaño de la isla, el impacto relativo es el más alto en términos de PIB. La contribución fiscal real asciende a 27,2 millones de dólares, equivalente al 0,75 % del PIB. El consumo local alcanza los 113,5 millones de dólares, un componente vital para su economía basada en servicios y turismo.
Etiquetas
EFE
EFE es la primera agencia de noticias en español y distribuye 3 millones de noticias al año en texto, fotografía, video, audio y multimedia.
