Santo Domingo.– El exministro de Educación, Melanio Paredes, calificó como “muy grave y preocupante” que, a más de una semana de la muerte por ahogamiento de la estudiante haitiana Stephora Anne-Mircie Joseph, de 11 años, las autoridades no hayan ofrecido explicaciones claras sobre lo ocurrido durante una excursión del Colegio Davinci en Santiago.
La menor falleció en la piscina del centro recreativo Hacienda Los Caballos, en Gurabo, provincia Santiago, y hasta el momento ni el Ministerio de Educación (Minerd) ni la Procuraduría General de la República han explicado públicamente las razones del incidente.
Paredes, quien habló durante el XVI Congreso Internacional Dice 2025, advirtió que este silencio institucional refuerza “una peligrosa tendencia al odio y la discriminación” en el país, especialmente por tratarse de una niña de origen haitiano.
“Los derechos humanos deben ser defendidos sin importar la nacionalidad, el color o la religión. Ese caso revela una tendencia peligrosa hacia el odio y la discriminación que divide a la sociedad dominicana”, expresó.
Exministro de Educación y miembro del Comité Político del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Melanio Paredes.
“No puede haber ocultamiento”
El exministro insistió en que la muerte de la menor debe investigarse de manera exhaustiva y transparente.
“Después de tantos días, ni el Minerd ni la Procuraduría han establecido las causas del deceso. No debe haber ningún tipo de ocultamiento. La sociedad merece respuestas claras”, afirmó.
Incluso sugirió que sectores influyentes en Santiago podrían estar intentando minimizar el caso, lo que consideró inadmisible.
Responsabilidad familiar y deterioro de valores
Paredes también abordó el impacto del deterioro social en los entornos educativos y la necesidad de mayor responsabilidad por parte de las familias.
Se refirió al fenómeno de hogares monoparentales que representan alrededor del 40% y la falta de supervisión adulta que afecta el comportamiento y la seguridad de muchos estudiantes.
“Los valores se aprenden en el hogar. Muchos niños se están criando sin la adecuada supervisión de padre o madre, y eso los expone a riesgos como violencia, microtráfico y conductas inapropiadas”, advirtió.
La “Casa de Alofoke” como símbolo de permisividad peligrosa
Paredes citó el caso de la llamada “Casa de Alofoke” para ilustrar lo que considera “un clima de permisividad social” que influye negativamente en la conducta de los jóvenes.
“Aquí creemos que podemos permitirnos todo. Mire lo que ha pasado con la Casa de Alofoke. Esa permisividad, unida a la falta de controles y de valores, está enviando señales muy peligrosas a nuestros hijos e hijas”, sostuvo.
El exministro dejó claro que su observación no pretende descalificar géneros musicales, sino alertar sobre comportamientos promovidos sin supervisión social adecuada.
Pide controles más estrictos en escuelas públicas y privadas
Paredes consideró urgente reforzar los controles institucionales y mejorar el acompañamiento familiar dentro del sistema educativo.
“Las direcciones regionales y distritales deben involucrarse más. Cuando la familia no es nuclear, hay que prestar mayor atención porque esos niños están más expuestos. La escuela no puede ser un espacio para reproducir conductas degradantes”, puntualizó.
También instó a los medios de comunicación a mantenerse vigilantes, asegurando que muchos hechos que antes no ocurrían en los planteles ahora se han vuelto frecuentes.