Las fuerzas del orden cerraron accesos al Ministerio de Medio Ambiente tras el hecho cobró la vida de Jorge Mera. ELIESER TAPIA
SANTO DOMINGO.-Una situación desesperada se vivió ayer en el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, luego de la tragedia que terminó con la vida de su titular Orlando Jorge Mera.
El ministro fue acribillado a tiros pasadas las 11 de la mañana y mientras se encontraba en su oficina, por un amigo de infancia nombrado Miguel Cruz.
Tan pronto se escucharon los disparos, los empleados fueron evacuados del edificio, pero retenidos por las fuerzas del orden junto a la verja perimetral.
Las expresiones de desesperación, duelo y miedo no se hicieron esperar.
Algunos pedían a gritos que les dejaran salir, otros ofrecían declaraciones a la prensa a través de los barrotes y algunos se saltaron el cerco encaramándose a las ventanas de las garitas de seguridad.
Llegada de los swat
Cuando todo aparentaba estar controlado, decenas de empleados salieron corriendo despavoridos tras escucharse algunos disparos. Paralelamente, ingresaron al edificio agentes de la unidad especializada de comando contraterrorismo conocidos como SWAT.
Policías y militares se encargaron entonces de reforzar el perímetro. Fue ahí cuando circuló el rumor de que el matador se había atrincherado en el edificio tomando varios rehenes. Al momento de escribir esta nota, estas versiones no habían sido ni validadas ni desmentidas por las autoridades.
Lo cierto es que, tras poco más de una hora de la llegada de los SWAT, estos se retiraron del lugar llevando consigo, esposado y fuertemente custodiada a una persona que se presumía era el responsable. Esta versión pese a ser la más racional, algunos medios la tergiversaron declarando que Cruz se había entregado tras lograr escapar en el tumulto.
Vecinos de la Parroquia Jesucristo Sumo y Eterno Sacerdote, en la calle San Pío casi esquina Enriquillo, desmintieron esa versión reafirmando que el victimario fue llevado allí por militares.
Desfile de funcionarios
Una acción que bien puede definirse como impudorosa, de mal gusto e innecesaria, fue la asistencia como si de un desfile se tratase, de decenas de funcionarios en procura de ver el cuerpo.
Innecesaria porque la muerte de Jorge Mera ya había sido confirmada y su presencia en el lugar no tenía ninguna razón de ser más que retrasar los trabajos del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif).
Las personas que se encontraban en el antedespacho del ministro, además del testimonio de los fisgones, ayudaron a reconstruir en lo inmediato los hechos.
Algunos comentaron sobre una discusión previa; los dirigentes comunitarios de Santiago Rodríguez que se encontraban esperando a Jorge Mera dijeron que alguien entró y se escucharon disparos… la mayoría coincidió en que fueron siete los proyectiles que lo impactaron.
¿Falla en seguridad?
— Antecedente
Algo similar ocurrió en 2015, cuando el entonces alcalde de Santo Domingo Este, Juan de los Santos, fue asesinado por un amigo de la familia. Ambos matadores lograron llegar hasta sus víctimas armados.
Familia Jorge Mera pide privacidad ante pérdida
Nota. La familia del fenecido ministro de Medio Ambiente, Orlando Jorge Mera, emitió un comunicado en el que indican que perdonan al autor del crimen, ya que uno de los legados más grandes que les dejó fue no guardar rencor.
La familia Jorge Villegas agradeció las muestras de solidaridad que han recibido tras la muerte de Orlando, y pidió a la opinión pública consideración y respeto a la privacidad en un momento tan difícil y doloroso como el que atraviesan en estos momentos. Confirmaron que Orlando Jorge Mera falleció víctima de varios disparos hechos por un amigo.