SANTO DOMINGO.-La dificultad visual es una de las principales causas de falta de concentración y atención en las aulas escolares, que afecta el aprendizaje del niño, en razón de que a través de los ojos el cerebro procesa el 90% de toda la información que recibe.
Después de los siete años, los problemas refractarios o visuales no son corregibles, por lo que a juicio del oftalmólogo Juan Lorenzo Ubiera, la nitidez visual de cada niño debe ser evaluada antes de iniciar las clases.
“Más aún, este año en el que las clases se impartirán de forma virtual, el niño pasará largo tiempo sentado, probablemente sin supervisión y si tiene una mala visión o mala graduación de los lentes no prestará la atención necesaria, lo que afectará su aprendizaje”, explicó.
El especialista en retina, vitro y cataratas del Centromed, advirtió que si estos problemas no se atienden a tiempo el niño padecerá de enfermedades visuales hasta la tercera edad.
Estas pueden ser la miopía (que no ve de cerca), cuya incidencia afecta alrededor del 20% de la población dominicana, la hipermetropía (que no ve de lejos) y el astigmatismo que afecta más o menos a un 10%.