Alexis Rafael Peña.
En esta Conflictos y Mediaciones colecciono acontecimientos de resolución alterna de conflictos que iluminan a las personas a realizarse en la paz, tolerancia y convivencia. Se trata del 20 aniversario de la Mediación Comunitario; de los 15 años en Mediación Escolar y el planteamiento del proyecto piloto de la Mediación Familiar en noviembre del 2005 para sus 15 años en este 2020 y en el 2021 los tres lustros de servicios del Centro de Mediación Judicial (Cemeju).
En este 2020 he contado y recordado tres acontecimientos que por su dimensión, importancia y trascendencia he narrado para las personas que desean profundizar en estos mecanismos, los cuales invitan a la gente a ser tolerante en medio de la diversidad de posturas y acontecimientos que por su impacto crean controversias y oportunidades.
La primera fue el establecimiento de la mediación comunitaria en el año 1999 en el municipio Los Alcarrizos, que por circunstancias fue efímera su implementación.
Luego con el esfuerzo de iglesias, organizaciones sociales y de la sociedad civil, inicia sus labores en el barrio Mejoramiento Social del Distrito Nacional el Centro de Mediación Comunitario María Auxiliadora (CEMECOMA), auspiciado por 40 dirigentes voluntarios y sensibilizados para promover la convivencia en sus comunidades.
Esas organizaciones también lograron insertar en la parte alta de la capital la primera fiscalía barrial, en donde el ministerio público del Distrito Nacional dispuso la instalación de un fiscal adjunto para realizar conciliaciones y el respeto de los derechos humanos de la ciudadanía de esas comunidades.
Según cifras estadísticas ofrecidas por ambas instancias, CEMECOMA y la Fiscalía Barrial María Auxiliadora, sólo en tres años y medio fueron atendidas la cantidad de 450 mil personas de todos los extractos sociales del Distrito Nacional y del Gran Santo Domingo, de manera ocasional.
Recordar que el Centro de Mediación funcionaba dentro del local del Instituto Postal Dominicano (Inposdom) y en el destacamento policial, el ministerio público. A diario eran atendidos entre 100 a 150 personas.
Por otro lado, recordamos el surgimiento de la Mediación Escolar primera en su género en el país, en el sector Domingo Savio mejor conocido como Los Guandules. En el cual fueron entrenados niños, niñas y adolescentes en la Escuela Básica Domingo Savio Fe y Alegría.
En el cual docentes y discentes cuentan que esa experiencia hizo cambios tanto en los comportamientos de los niños, niñas y adolescentes del Centro, como en el personal de la comunidad educativa.
La experiencia marcó entre ellos y ellas un antes y un después. La clase estudiantil y profesoral manejaban el conflicto con opciones creativas. En donde la colaboración y cooperación de las personas se convirtió en una rutina en el comportamiento de todo los actores de la escuela.
Mientras que la Mediación Familiar no tenía en la República Dominicana un punto de partida en la sociedad y menos en las instancias judiciales. Para hablar sobre ese tema localizaron a quien suscribe para compartir puntos en esa herramienta y a la vez, empezar exponer en borrador posibilidades de inicio en el Poder Judicial.
La Dirección de Familia, Niñez, Adolescencia y Género dirigida por Carmen Rosa Hernández, l la cual proyecto entre sus planes, ofrecer servicios de técnicas y herramientas de Resolución Alterna de Conflictos (RAC) para padres, madres y tutores; en donde estos antes de ir al tribunal a conocer disputas relacionado a las personas menores de edad, tuvieran la oportunidad de sentarse y buscar acompañadas de un tercero imparcial (mediador/a), una salida satisfactoria a favor de la infancia.
De esa idea surgió el proyecto Centro de Mediación Familiar del Poder Judicial (CEMEFA). En donde el mes de noviembre, el de la familia, dio un giro diferente a los demás años en la institución que impartía justicia a los justiciables. Ahora, bajo una modalidad voluntaria y confidencial, las personas tienen la facilidad de buscar una salida amigable antes de partir a la instancia adversarial. Bravo.
El hoy Centro de Mediación Judicial (CEMEJU), produjo cambios en el aparato judicial. Dos resoluciones, una como políticas públicas de los Rad-Rac-Marcs y la otra, la que regulariza la mediación en el país.
Por último dos organizaciones sociales han facilitado la ejecución de estos proyectos, la Coordinadora de Organizaciones Barriales Don Bosco (Codonbosco) y el Centro de Educación para la Paz, Tolerancia y Desarrollo (CEPATODE). Ellas fueron la mesa y patas para que hoy fuera realidad en el país estos proyectos y otros espacios de concertación y orientación ciudadana.
