Más dinero a las bocinas y menos pa' la educación

Más dinero a las bocinas y menos pa’ la educación

Más dinero a las bocinas y menos pa’ la educación

Desde el gobierno se está  está planteando la «magnífica propuesta» de reducir la partida correspondiente  al 4 por ciento del Producto Interno Bruto que se otorga a la educación y a su vez, aumentar más de 1,800 millones de pesos a la Dirección de Estrategia y Comunicación Gubernamental (Diecom), una de las entidades que más dinero recibirán en el proyecto de modificación  presupuestaria que se sometió ante la Cámara de Diputados la semana pasada.

De entrada la propuesta parece absurda y  descabellada y de hecho lo es, pero  si la analizamos un chin más a fondo, también termina revelándonos  la naturaleza  de este gobierno. Los estrategas comunicacionales saben que es  más fácil manipular a un pueblo ignorante, que a uno que haga buen uso de las neuronas.

En la lógica del gobierno del PRM,  es mejor reducir los recursos de educación y aumentar  el presupuesto  de la Dirección  de Comunicación Gubernamental.  Eso permitiría contratar y dar publicidad a más comunicadores de esos que solo saben repetir y que el pueblo sabiamente bautizó como bocina.

El bocinazgo no es una práctica nueva, de hecho, el PLD realizó un  magistral  uso de ella. Contrató a cientos de bocinas  para que repetieran que esta era la cuna de Alicia, el país de las maravillas.

El  autoproclamado gobierno  del cambio, lejos de suspender el bocinazgo,  lo ha ampliado, pues llegó  con nuevas  bocinas  y contrató los servicios  de las viejas.

¿Qué importa que el 4% por ciento sea  una conquista ciudadana o que haya una ley que obligue  a mantener y a aumentar gradualmente esos fondos?, ¿Qué las evaluaciones dicen que tenemos uno de los peores sistema educativo  de Latinoamérica?, ¿que estamos en los últimos lugares en la prueba PISA? No ombe, nada de eso es relevante,  lo realmente  trascendente  es  que las  bocinas y los influencers repitan en sus canales que esta es la Suiza de América (aunque no hayan ido a Europa),  pa’ que los turistas agarren sus shorts y calizos y  bajen en masa pa’ Erredé.

¿Para qué invertir en educación si los buenos profesionales están más apurao  que Rochy RD por la visa gringa?
Pa’ que invertir  en educación  si gran parte de los que consiguen una beca de estudios en el extranjero se quedan por allá hasta fregando plato?  Aquí  lo que hace falta es poner  a las «banqueras» a cantar dembow, a los motoristas  a practicar  motocross  y que el Congreso declare al Alfa como el cuarto padre de la patria, quizás así nos convertiriamos  en una nación  del primer mundo.