Santo Domingo.-La República Dominicana fortalece su capacidad de respuesta ante desastres naturales a través de diversos mecanismos, entre ellos el de protección social adaptativa, el cual permiten asistir de manera rápida y focalizada a los hogares más vulnerables.
Además, en la actualidad se está trabajando en un anteproyecto de ley a fines de actualizar la Ley de Gestión de Riesgos en consenso con todos los sectores involucrados
De acuerdo al Informe de Riesgo Fiscales, entre 2022 y 2025, el país desembolsó RD$1,476 millones mediante bajo el referido esquema en el cual se benefició a miles de hogares afectados por el huracán Fiona, la explosión en San Cristóbal y las lluvias de noviembre (2023), las inundaciones de 2024 y la tragedia del club Jet Set (2025).
Explica que el principal instrumento de esta estrategia es el Bono de Emergencia, creado mediante el Decreto 377-21, que consiste en una transferencia monetaria no condicionada otorgada por un período de entre uno y seis meses, según la magnitud del evento, el número de personas afectadas y los recursos disponibles.
El informe señala que los beneficiarios deben cumplir con los criterios del Programa Supérate y ser clasificados como afectados por el Sistema Único de Beneficiarios (SIUBEN) mediante la Ficha Básica de Emergencia (FIBE).
Agrega que la Ley 183-02 establece que, ante declaratorias de emergencia nacional, el Banco Central puede otorgar préstamos al Gobierno Central que no superen el 2% del promedio de los ingresos corrientes de los últimos tres años. Este mecanismo se activó en 2017 ante lluvias torrenciales, mediante un crédito por RD$8,000 millones.
Este artículo fue publicado originalmente en El Día
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Dilenni Bonilla
Periodista egresada de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), con diplomados en Comunicación Estratégica, Economía, Finanzas y Fondos de Pensiones.