Más allá de los estadios, Mundial de Futbol le da vida a favela paulista de Brasilandia

Más allá de los estadios, Mundial de Futbol le da vida a favela paulista de Brasilandia

Más allá de los estadios, Mundial de Futbol le da vida a favela paulista de Brasilandia

São Paulo, Brasil.- El verde y amarillo en el suelo de las calles, cintas ‘canarinhas’ que cubren el cielo y la sonrisa de los vecinos iluminan a Brasilandia, una de las mayores favelas de Sao Paulo que se engalana para recibir el Mundial Brasil 2014.

A nueve días del comienzo del Mundial, que será inaugurado precisamente en la mayor urbe brasileña el 12 de junio con el partido Brasil-Croacia del grupo A, Brasilandia está animada y acoge con alegría el deporte de multitudes, pero no deja de sumarse a la ola de reivindicaciones por mejores servicios públicos.

Las calles de Brasil, aprovechando que el mundo tiene los ojos en el país por causa del Mundial, reclaman por la corrupción, el hambre, el saneamiento básico deficiente, la falta de infraestructura, transporte, educación, salud y seguridad ciudadana.

Brasilandia también participa de los reclamos, pero en honor a su nombre abraza el fútbol y por eso 180 metros de la calle Geraldo Alves de Carvalho, una de las principales para entrar al barrio, fueron pintadas especialmente para el mundial y durante un mes por seis vecinos voluntarios.

“Pintamos de las nueve de la noche hasta las cuatro de la madrugada para terminar el trabajo a tiempo, pues había días de mucho viento y frío. Pero la decoración anima las personas y eso fue divertido saberlo, a pesar del cansancio”, señaló a Efe el artista callejero Alessandro Franklin.

Para la decoración fueron usados 300 litros de tinta y diez kilos de cintas en dos calles participantes del proyecto de Google Street, que patrocinó los materiales para registrar veinte espacios de Sao Paulo decorados especialmente para el Mundial en Brasilandia y el barrio vecino de Freguesia do Ó.

Los propios vecinos completaron con donaciones los materiales para ampliar el proyecto decorativo, contó Franklin. Cerca de 264.000 personas, en 49 sectores de Brasilandia decorados con proyectos similares a los de Franklin y sus amigos.

En las calles aparecen “estampados” y “coloridos” los rostros del técnico Luiz Felipe Scolari y de jugadores como Neymar y David Luiz.

En la calle Carlos Dias muchas casas tienen pintadas sus fachadas con los colores verde, azul y amarillo y la mascota del Mundial, Fuleco, se asoma también en las paredes, pero igualmente sobresalen las frases de reivindicaciones por “mejor” salud, educación, vivienda y seguridad.

La vecina Elisabeth Alves de Almeida pintó con varios amigos un payaso con un cuchillo en protesta por los altos impuestos cobrados en el país y que contrasta con las banderas alusivas al Mundial. “Nosotros no somos payasos, queremos educación, seguridad y vivienda”, relató a Efe Alves de Almeida.

Para los habitantes, los partidos en el estadio representan una realidad distante, pero la Copa del Mundo seguirá por más días, después del torneo, en una de las tantas favelas brasileñas que esperan con ansias gritar frente a los televisores los goles de la canarinha.