Atlanta.- Marwin González estaba casi acabado, igual que los Astros de Houston. Pero Dusty Baker le tuvo fe, y el último jugador incorporado al róster para la Serie Mundial respondió con un hit clave, igual que hace cuatro años.
El batazo de González como emergente contra A.J. Minter rompió un empate en la quinta entrada y encaminó a los Astros a una victoria 9-5 sobre los Bravos, tras remontar una desventaja de cuatro carreras, manteniéndolos con vida en la Serie Mundial. Atlanta sigue arriba 3-2, pero la serie vuelve ahora a Houston.
«La química del equipo es muy buena cuando está él», expresó Carlos Correa. «Sabemos que en los grandes momentos no se va a sentir amilanado».
Houston perdió el primer juego de la Serie Mundial del 2017 ante los Dodgers de Los Ángeles y estaba 3-2 abajo en el segundo cuando González pegó un jonrón con la cuenta 0-2 contra el taponero del Juego de Estrellas Kenley Jansen en el inicio de la novena entrada. Los Astros terminaron ganando en 11 innings y se alzaron con la serie en siete juegos. Fue su primer título.
Ese batazo fue como derecho. Este otro fue como zurdo, reflejo de la versatilidad de este pelotero de 31 años que puede jugar en el infield y en los jardines.
González jugó tres partidos en las menores y fue subido. Bateó de .176 con ocho empujadas en 14 juegos en el último mes de la temporada.
Fue incorporado al róster la semana pasada, en reemplazo de Jake Meyers, quien se lesionó el hombro izquierdo al chocar contra el muro durante el cuarto juego de la serie divisional. González debutó en las mayores con los Astros en el 2012, la segunda de tres temporadas seguidas en las que el equipo perdió 100 juegos.