SANTO DOMINGO.- «Yo no tuve valor, Adalgisa, y mientras vida tenga no puedo mirarte a la cara porque no te puedo devolver a Emely».
Así se expresó Marlin Martínez, acusada junto a su hijo Marlon de la muerte de la adolescente Emely Peguero, en la conclusión del juicio de fondo en contra de ambos que se llevó a cabo en el Segundo Tribunal Colegiado de San Francisco de Macorís.
La acusada aprovechó la última oportunidad que le dieron los jueces para referirse a los hechos del proceso que se le sigue y respondió a Adalgisa Polanco, madre de Emely Peguero, quien cuando tomó la palabra le exigió que la mirara a la cara.
Envuelta en llantos, Martínez justificó ante el tribunal por qué guardó silencio sobre la muerte de Emely.
«Ella (Adalgisa) era una madre para Marlon y para mis hijos , y yo no tuve el valor de decirle que su hija no tenía vida, por eso yo callé, pero no porque quisiera que nada así sucediera», expresó.
Manifestó que no quiere ver a ninguna madre en el lugar de Adalgisa Polanco, pero tampoco en su lugar, «porque si yo le decía a Adalgisa, a quien yo estaba juzgando era a mi hijo».
Señaló que su hijo Marlon era un ejemplo para su colegio y para la sociedad, hasta ese día, en el que le quitó la vida a Emely Peguero.
Negó que haya incitado a Marlon a cometer el crimen, enfatizando que «solo una persona que no tenga raciocinio puede pensar que una madre va a incitar a su hijo a que fracase».