Santo Domingo.-“La fe en la Justicia no se puede perder nunca, porque si se perdiera la sociedad sucumbiría”, con esta frase el presidente de la Suprema Corte de Justicia (SCJ), Mariano Germán Mejía, instó a la población a seguir confiando en este poder pese al escándalo de corrupción que envuelve a seis jueces.
El jurista, con 44 años de ejercicio profesional, garantizó a la sociedad que en manos de las actuales autoridades la Justicia no “sucumbirá” como han estimado algunos sectores, quienes califican de alarmante la situación del sistema judicial del país.
Con tono pausado, Germán Mejía se mostró optimista en que el problema por las acusaciones de irregularidades que han llevado a la suspensión de cinco jueces y la renuncia de un sexto será resuelto por las vías legales establecidas.
“El pueblo dominicano tiene que tener la seguridad de que la Justicia va a seguir avanzando. Estos casos se van dirimir y volverá entonces la mesa a tener el mismo nivel”, aseguró Germán Mejía.
¿Mercado judicial?
En momentos que críticos de la situación del Poder Judicial aseguran que en la Justicia se ha instaurado todo un cartel que vende sentencias favorables a imputados, el también presidente del Consejo del Poder Judicial negó que la Judicadura sea un mercado.
“En la Justicia no hay mercado. La Justicia es una institución con muchos valores”, dijo Germán Mejía al referirse al torbellino por el que atraviesa todo el sistema del cual él es la cabeza.
“Que pueda aparecer uno, dos, tres, cuatro o cinco (casos de corrupción), pero eso existe hasta en la religión, en el seno de la iglesia”, argumentó.
Germán Mejía manifestó que la situación actual no significa que “la Justicia está en crisis, ni que vaya a colapsar” tal y como lo aseguró recientemente la Fundación Institucionalidad y Justicia (Finjus), una de las entidades que más ha criticado la gravedad de la situación.
Aseguró que en los casos en cuestión él ordenó las investigaciones y al ver que había visos de veracidad apoderó al Ministerio Público.
En su acusación en contra del exjuez Francisco Arias Valera y los demás magistrados suspendidos, el Ministerio Público señala informes que le fueron enviados a Germán Mejía desde 2013 hasta este año en los que se denunciaban irregularidades.
Explicó que en la coyuntura actual, tras la apertura de las investigaciones se evidenció cierto grado de verdad de las denuncias, razón por la cual se abrió juicio disciplinario contra los jueces José Duvergé Mejía, Rosó Vallejo Espinosa, Delio Germán Figueroa y Víctor Mejía Lebrón, así como un proceso penal a la jueza Awilda Reyes Beltré, realizado por la Procuraduría.
Todos están señalados como integrantes de una banda enquistada en la Justicia que negociaba libertad y variaciones de medidas de coerción a reos, especialmente vinculados al crimen organizado, la cual supuestamente dirigía el exmiembro del Consejo del Poder Judicial, Francisco Arias Valera.
“Esa es una situación momentánea, pasajera, que se presentó”, dijo el magistrado Germán Mejía.
Las sanciones a imponer
Tras los procesos que se siguen contra los magistrados mencionados, Germán Mejía expresó que “a cada quien le toca la música que él elige que le toquen”.
Se refería a las sanciones que deberán enfrentar los jueces suspendidos en caso de que sean declarados culpables o no de los hechos que se les imputan.
Sin especificar número, agregó que a su paso por el Poder Judicial ha sancionado a muchos jueces, algunos con la cancelación, la separación de la institución, suspensión y otros han sido descargados.
“Mi convicción es que yo no he sancionado más allá o a nadie que no se merezca la sanción que se le ha impuesto, ni que le haya impuesto una sanción menor que la que se merece”, resaltó con semblante reflexivo.
Así mismo, dijo que las informaciones y denuncias que le llegan sobre jueces que incurren en irregularidades han sido investigadas a lo interno del Consejo del Poder Judicial.