De acuerdo con el afamado historiador y filósofo israelí Yuval Noah Harari (Sapiens. De animales a dioses. Breve historia de la humanidad, Debate, Barcelona, 2017) una de las facultades determinantes, que permitió al sapiens imponerse sobre las demás especies en la más remota Antigüedad fue la capacidad para formar equipo y emprender proezas mediante la cooperación a gran escala.
Apoyados en el recurso de la extrapolación, podríamos decir que la pandemia de la Covid-19 ha exigido a la civilización hipermoderna un esfuerzo de colaboración a gran escala, por encima de las diferencias ideológicas, económicas, religiosas y de cualquier otro orden, a fin de preservar la vida humana y de mitigar los efectos que en términos económicos y sociales ha generado la presente crisis sanitaria global.
En febrero de este año 2021, diezmada casi la sociedad por el nuevo coronavirus y sus variantes letales, el Banco Popular Dominicano lanzó una campaña de publicidad institucional o de relaciones públicas con un único propósito: animar a los dominicanos, y con ellos a los ciudadanos globales, a enfrentar con optimismo y firme sentido de la esperanza, la incertidumbre y la compleja realidad que nos agobiaba, impulsándonos a redescubrir todo el potencial que como pueblo llevamos con nosotros, para superar juntos, mediante la colaboración a gran escala, las adversidades y situaciones aciagas que la crisis sanitaria y sus secuelas socioeconómicas representan. Tiene, pues lugar, un mensaje de resiliencia colectiva.
De esta forma, trabajando de la mano los equipos estratégicos del Popular, la publicitaria Cazar3 y la productora fílmica Kokaleka salta a la escena “El Lado Positivo” que, mediante soportes audiovisuales, impresos, radiales y digitales, a ritmo de pop urbano y toques de merengue, recorriendo las calles de nuestras ciudades y destacando la laboriosidad y abierta sonrisa de nuestra gente, somos capaces de encontrar el giro positivo a los desafíos, para verlos como oportunidades que pueden superarse a través de la unidad de propósitos y de la búsqueda del bien común.
“El Lado Positivo” nace con un manifiesto que invita a mirar la vida, no importa la circunstancia, desde ese ángulo afirmativo, indómito y bravo que representa la esencia de lo que somos como dominicanos y que nos permite valorarnos, reafirmarnos y proyectarnos con autenticidad.
Un ángulo que no admite que los sueños se detengan, que los planes se pospongan, sino que más bien los adaptemos a lo factible para su realización. Nos invita a ser solidarios, a estrechar los vínculos humanos, a cuidar el planeta, de manera que apostemos a la sostenibilidad de la vida y del mundo. Este manifiesto nos da la clave para, pese a la pandemia, ver nuestro país y el mundo con optimismo y esperanza.
Este llamado surtió efectos dentro y fuera del país, impactando a más de 6.5 millones de personas y ganando, en abril pasado, un premio especial de la Asociación de Agencias de Comunicación Comercial (Adecc) y la revista Factor de Éxito.
Recientemente, ganó el Oro a la Mejor Campaña de Comunicaciones y Relaciones Públicas, en la categoría Servicio Público del Año, en la décimo octava edición de los prestigiosos Stevie Awards, que otorga la International Business Awards (Iba) de los Estados Unidos, para empresas y organizaciones de todo el mundo. Hubo más de 12,000 nominaciones y concursaron más de 70 países.
El jurado, compuesto por 260 ejecutivos internacionales, reconoció en esta campaña una enorme contribución a la comunidad y su capacidad empática e inspiradora.
“El Lado Positivo” trascendió las fronteras dominicanas y se transformó en mensaje mundial, portador del espíritu afirmativo de nuestra gente y de su fe en la construcción de un mundo mejor. Enhorabuena, dominicanos. ¡Adelante!