SANTO DOMINGO.-A ella se debe la fama negativa atribuida a muchas mujeres que abandonan o descuidan a sus hijos sin importar la suerte que corran.
Se trata de la planta medicinal (Kalanchoe), conocida en el argot popular como mala madre.
Esta especie originaria del Viejo Mundo (Europa, Asia, África e islas aledañas), según Ricardo García, director del Jardín Botánico Nacional, tiene como principal característica que sus tallos y hojas son carnosos.
“Le viene el nombre de mala madre porque produce gemas o plantitas en el borde de sus hojas que, cuando llegan a cierto tamaño, sus raicillas caen al suelo y crecen de forma independiente, por eso le dicen así, porque bota los hijitos”, refiere el botánico.
La especie está naturalizada aquí junto a otra calificada como la bruja (Kalanchoe pinnata), ambas introducidas, y crecen sin ningún cuidado, debido a que tienen mucha reserva en sus hojas.
Propiedades
En base a estudios, a determinadas variedades se les atribuyen propiedades medicinales, incluso anticancerígenas, explicó el reconocido botánico Ricardo García.
En el país, regularmente se le da un uso ornamental en maceteros y jardineras con fines de embellecimiento.
La planta como tal prospera en bosques secos, junto a otras como la Kalanchoe tubifloras, que por lo regular se encuentran en las zonas sur y noroeste del país.
“No es una especie extremadamente abundante, pero tiende a formar poblaciones grandes porque dan muchos hijos”, refirió el estudioso, que especificó que las especie no están en categorías de amenaza ni representan riesgo de ser invasoras.
La bruja, que mantiene especie de hermandad con la mala madre, se encuentra en bosques húmedos como el Parque Nacional Los Haitises y Monte Plata.
Flores rosadas
La mala madre produce hermosas flores rosadas, pero su mayor atractivo, de acuerdo a García, son las hojas grandes, similares a la sábila, y dice que en apenas dos meses es una planta relativamente adulta.
“Las hojas son verdes, grisáceas y en ocasiones rojizas, y las brujas verdes rojizas”, afirmó García.
La mala madre se consigue en las botánicas, que la ofrecen con fines medicinales. Sobre la Kalanchoe pinnata, numerosos laboratorios en universidades y hospitales han comprobado su efecto anticanceroso, antihistamínico, antiinflamatorio, antidiabético, antialérgico (contra el dolor) y antiúlcera estomacal.
Estas especies figuran en la colección de plantas medicinales del Jardín Botánico.