Luis Miguel: la emoción por un ídolo

La Romana.-Es reconocido por ser uno de los cantantes latinoamericanos más populares, y todavía en muchos países, incluyendo República Dominicana, lo tienen como su “ídolo” indiscutible del bolero.

Es el más romántico y  en escena se deja ver ese dejo de coquetería que todavía envuelve al cantante mexicano  Luis Miguel.

El artista eligió a Altos de Chavón para dar  inicio a su gira número 21 titulada “The hits tour”, que podría estar ‘girando’ hasta mediados de  2014.

Y como toda estrella que ha sido vendida y que todavía podría seguir creciendo, Luis Miguel logró “reventar”  el anfiteatro de piedras ubicado en La Romana.

Su entrada

A las 9:35 minutos apareció “El sol de México”, en un escenario no tan ambicioso para ser el inicio de una gira, siete pantallas LED, ocho músicos, una corista y muchas luces. También se divisaba en el centro del escenario una mesa con flores blancas,  jugo, gaseosa, y    ocho botellas de agua.

Salió como todo un  galán, impecable, derrochando elegancia con un traje negro, camisa blanca y corbata de raya, era Luis Miguel, y no podía dejar su corona del cantante mejor vestido en un escenario.

Su primer tema fue   “Mujer de fuego”  y  desde ahí la gente no paró de corear sus canciones, aunque  alerta a que más adelante Luis Miguel cantaría sus éxitos más emblemáticos, pero eso no ocurrió. No cantó  “Amor, amor, amor”, “Por debajo de la mesa”,  “México en la piel”, “Si nos dejan” , “Tú o ninguna”, y otras que la gente se quedó esperando.

Aunque un poco cambiado, con  varias  libras de más encima, Luis Miguel entregó toda su intensidad y habló como nunca con el publico dominicano.

“¿Tienen ganas de cantar? ¿Tienen ganas de bailar? ¿De que más tienen ganas?”, fueron algunas de las preguntas que el cantante   hacía a un público que solo gritaba su nombre y que le coreaba todas sus canciones y jamás lo dejó solo en ningún tema.

Los temas

“El sol”, continuó con una veintena de sus melodías, que incluyó a “Hasta que me olvides”, “No sé tú”, “Historia de un amor”, “Suave”, “Sol, arena y mar”, “La puerta se cerró”, “Se te olvida”, “Esa niña” y “Un hombre busca una mujer”, hasta agotar casi dos horas cantando.

En este recorrido musical no pudieron faltar los temas que rememoraron su  juventud,   “Los muchachos de hoy” y “Ahora te puedes marchar”, los cuales pusieron a sus fanáticos a  bailar.

Carteles con “Luismi te amo”, no faltaron ni la galantería de este artista que, según algunas de sus fanáticas, va perdiendo sus encantos físicos.

Repartió flores blancas entre sus fans de  primera fila, le dio un  beso en la mejilla a una joven que le entregó  un ramo de lirios blancos, aunque quien se llevó un beso en la boca fue su novia, una modelo rusa apodada Kasia, quien estaba en VIP custodiada por un guardaespaldas.

Aunque buena la organización, se vio un poco de desorden porque el área VIP estaba sobrevendida y la gente estuvo peleando por un  puesto al llegar.

Una complicidad entre los músicos y el artista es notoria en escena.

El  dj Luís Matos fue  la contraparte y la gente le respondió bien.