Londres.- El dominicano Luguelín Santos, que llegó contrarreloj a este Mundial de atletismo en Londres tras una preparación marcada totalmente por una grave lesión, quedó eliminado este sábado en la primera ronda de los 400 metros.
Cinco años después de colgarse la plata en los Juegos Olímpicos de Londres-2012, Luguelín regresaba al mismo estadio, pero esta vez las sensaciones fueron muy diferentes, aunque él se sentía ya ganador con el simple hecho de participar.
«Me quedo contento porque hace un mes no podía ni correr. Tuve una fractura por estrés en el sacro, estuve dos meses en cama sin hacer nada, y en un mes pudo entrenar y ponerme a correr. Hace dos meses los doctores me dijeron que no volvería a correr en mi vida.
Era una fractura rara, primer atleta del mundo que le pasa, y al sacro va todo el peso del cuerpo, pensaron que no iba a aguantar el entrenamiento», explicó Santos, muy tranquilo, tras su eliminación.
«Yo soy un luchador, con algo negativo en la cabeza no estaría aquí. Para mí estar aquí ya era un triunfo», apuntó.
La gran esperanza dominicana fue quinto de su serie, con un tiempo de 45.73, sensiblemente superior a su mejor marca personal (44.11) y también por encima de su mejor crono de 2017 (45.32). Clasificaban a semifinales los tres primeros de cada serie y los seis mejores tiempos restantes.
En el global de tiempos de toda la primera ronda, Santos finalizó 24º de 52 competidores, ya que los 23 primeros sí superaron la primera ronda.
Luguelín Santos, de 23 años, logró un año después de su plata olímpica de 2012 el bronce en el Mundial de Moscú en 2013, pero desde entonces no pudo volver a un gran podio en esta competición.
Después de este Mundial en Londres, Luguelín Santos se ha fijado dos nuevos retos: la Universiada de Taipei este mes y luego el Mundial en pista cubierta en Birmingham, en marzo de 2018.