SANTO DOMINGO.-Una rutina facial es importante y vital para el cuidado del rostro, ya que le brinda a tu piel las herramientas que necesita para prevenir, controlar y disminuir los signos de la edad que aparecen a lo largo de los años (signos de envejecimientos), ayudando a tener una piel más cuidada, saludable y lucir radiante.
Así lo afirma Erika Barroso, médica -especialista en Medicina Estética y Antienvejecimiento, al explicar que, en la rutina de belleza el rostro asume la humedad y nutrientes que necesita.
En este sentido, refiere que los productos que se encargan de regenerarla son los sueros especializados con altas concentraciones de activos específicos, que aportan mayor efectividad a la hora de resolver necesidades puntuales de la piel.
La galena recomienda incluirlos en la rutina de belleza porque te ayudarán a obtener resultados efectivos en menos tiempo. “Los sueros son productos con doble concentración de activos, más que una crema humectante o hidratante. Su textura ligera permite una fácil penetración o absorción hasta llegar a capas más profundas de la piel y multiplicar sus resultados”, dijo.
Al hablar de los productos que no deben faltar o son indispensables en esta rutina, describe que el primer paso debe ser una limpiadora facial, o agua micelar 2 en 1, un contorno de ojos, sueros especializados “superconcentrados”, con componentes como ácido hialurónico, ácido glicólico y B3, crema nutritiva para el rostro, protector solar, y complementos como las mascarillas.
Barroso, quien es ejecutiva de la marca LBEL, asegura que los sueros se han convertido en un producto indispensable dentro de las rutinas de cuidados, y pueden ser utilizados 2-3 veces a la semana gracias a sus altas concentraciones de activos, dos veces al día, por la mañana y noche; salvo que las instrucciones del suero indiquen lo contrario, como en el caso del suero de ácido glicólico, que es de uso exclusivo nocturno.
Frecuencia de uso
Sobre cuál es la mejor hora para usarlos, aclara que si quieres ayudar a tu piel en el proceso de recuperación y reparación la noche es el momento justo; mientras duermes tu cuerpo pasa por el proceso de recuperación y multiplicación celular, tras el desgaste del día. Durante el día es importante mantener la humectación por más tiempo, así aumentarás la barrera de protección ante agresiones ambientales.
Protección
— Prolongada
Usar una línea completa y establecer una rutina de cuidados garantiza que la piel tenga las condiciones adecuadas para absorber cada uno de los activos necesarios para intervenir en el proceso celular y ejercer un resultado efectivo.
— La clave
No le dejes todo el trabajo a un producto, tu mejor arma para prevenir, controlar y disminuir signos indeseados es cumplir con una rutina.