La gigantomastia, una afección caracterizada por el crecimiento excesivo de las mamas.
Santo Domingo.-Calambres en las manos, molestias en el cuello y falta de sueño eran algunos de los síntomas que afectaban a Micaela (nombre ficticio, historia real).
Micaela es una de las más de 30 mil mujeres en República Dominicana que padecen gigantomastia, una afección caracterizada por el crecimiento excesivo de las mamas.
A sus 36 años, mide 5’2» y pesa 140 libras. “De lejos parece que tengo mucho peso, pero no, son mis senos los que son muy grandes. Soy copa doble D. Uso talla M de pantalón y XL de blusa”, explica.
El cirujano plástico Manuel Peralta señala que esta condición no solo provoca molestias físicas, sino que también tiene consecuencias emocionales y sociales.
Causas y factores de riesgo
El especialista explica que la gigantomastia puede desarrollarse por diversos factores, entre ellos cambios hormonales, el uso de anticonceptivos y la alimentación.
El cirujano plástico Manuel Peralta.
“El cuerpo humano es el receptor final de las modificaciones en los alimentos. Actualmente, un ave puede ser consumida en 45 días, una vaca en un año y medio, y un cordero en menos de dos años. Esto significa que los alimentos ya vienen cargados de hormonas de crecimiento, lo que influye en el desarrollo precoz de los niños y en el crecimiento excesivo de las mamas en muchas mujeres”, detalla Peralta.
Síntomas incapacitantes
El aumento excesivo del volumen mamario no solo afecta la estética, sino que también genera síntomas que pueden ser incapacitantes, como:
Dolor de espalda crónico
Hormigueo y calambres en los brazos
Molestias en el cuello
Irritación en la piel debajo de las mamas
Surcos profundos en los hombros debido a la presión de los tirantes del sostén
“La columna se somete a una gran presión al cargar el peso de las mamas, lo que genera una serie de problemas de salud que pueden incapacitar a la paciente en su día a día”, indica el cirujano.
De espaldas a la Seguridad Social
Ante el impacto de esta condición en la calidad de vida de miles de mujeres, el doctor Manuel Peralta hace un llamado al Consejo Nacional de la Seguridad Social (CNSS) para que la reducción de mamas sea cubierta por las Administradoras de Riesgos de Salud (ARS).
“El tratamiento quirúrgico es la solución más efectiva para la gigantomastia. Sin embargo, muchas pacientes no pueden costearlo”, afirma Peralta.
Impacto psicológico y social
La gigantomastia no solo causa problemas físicos, sino que también tiene un fuerte impacto en la salud mental y el bienestar emocional de las mujeres que la padecen.
“Muchas adolescentes y mujeres adultas sufren bullying debido al tamaño de sus mamas, lo que puede derivar en trastornos psicológicos y baja autoestima”, enfatiza el cirujano.
La dama explica para muchos tener los senos grandes puede ser un atractivo y, ¿por qué no?, hasta sexy.
Sin embargo, «nadie imagina lo incomodo que resulta no poder acomodarte en la cama, el acoso de muchos hombre por que tus senos sexis, o lo difícil de algo tan simple como elegir una blusa», dice Micaela.
Efectos físicos y emocionales
Los senos de gran tamaño pueden afectar la salud de las mujeres de diversas maneras:
Físicos:
Desviación en la columna dorsal
Dolor intenso en la espalda, que en algunos casos obliga a la paciente a permanecer acostada por largos períodos
Dermatitis e irritación en el surco entre los senos y el tórax
Contracturas en el músculo pectoral, con manifestaciones de dolor en el pecho debido al peso excesivo
Surcos profundos en los hombros, causados por la presión de los tirantes del sostén
Emocionales y sociales:
Muchas pacientes presentan depresión, ansiedad y aislamiento social. En el caso de las adolescentes, el bullying es una realidad frecuente.
Además, muchas mujeres tienen dificultades incluso para encontrar un sostén adecuado a su tamaño.
Estas complicaciones también impactan el ámbito laboral, ya que el dolor crónico y las molestias físicas pueden llevar a ausencias frecuentes en el trabajo.
La hipertrofia mamaria se clasifica en cuatro niveles: leve, moderada, importante y muy importante, según el volumen de los senos y su impacto en la salud de la paciente.
Actualmente, la cirugía de reducción mamaria es el tratamiento más efectivo, ya que mejora significativamente la calidad de vida de las mujeres afectadas.
“Es fundamental que se reconozca la gigantomastia como una condición médica que requiere atención y cobertura de los seguros de salud. No es solo un tema estético, sino un problema de salud pública que afecta el bienestar de miles de mujeres”, explicó Peralta.