En Oregon, una llamada angustiosa condujo a la policía a una inquietante caza estatal para capturar a Benjamin Foster, el nuevo novio de Justine, después de solo dos meses de relación. Este es solo uno de los múltiples incidentes relatados en la nueva docuserie de Netflix, Los peores ex del mundo, producida por Blumhouse y dirigida por Cynthia Childs. La serie, que acaba de estrenarse, se estructura sobre la apremiante pregunta: ¿qué sabemos realmente sobre nuestras parejas?
Qué relata esta nueva docuserie
En esta nueva entrega, de cuatro episodios, se replican elementos como testimonios fascinantes, imágenes de cámaras corporales y recreaciones animadas para plasmar las monstruosas relaciones de pareja del pasado. Utilizando un enfoque en el análisis psicológico y la investigación forense, la docuserie revela los motivos y las consecuencias de estos crímenes impactantes.
La productora Blumhouse, conocida por su enfoque innovador en el género de terror, y los creadores de la exitosa serie predecesora, han llevado a la pantalla casos reales que subrayan la realidad, a menudo más perturbadora que la ficción. Muchas personas maltratadoras pueden presentarse como compañeros cariñosos pero resultan ser mentirosos patológicos y controladores. En declaraciones a Tudum, la directora destacó que estas personas pueden tardar meses o incluso años en revelar su verdadero rostro.
La serie también toca historias donde el control y la obsesión desencadenan tramas de asesinato. Rosa Hill y su madre, Mei Li, ponen en marcha un plan para obtener la custodia exclusiva del hijo de Rosa, poniendo en grave peligro a su familia. Estos relatos no solo buscan entretener sino también servir como advertencia sobre los peligros ocultos dentro de relaciones aparentemente normales.
Repleta de detalles y narrada mediante testimonios de testigos presenciales, Los peores ex del mundo proporciona una visión profunda y escalofriante sobre las dinámicas complejas y siniestras que pueden surgir en las relaciones amorosas, reflejando cómo el amor apasionado puede transformarse en obsesión y violencia.
La serie se inscribe dentro del popular género del true crime, que tanto atrae a las audiencias por su capacidad de presentar casos reales que, por su crudeza, pueden ser más aterradores que cualquier historia de ficción. La ves en Netflix.