Todos conocen la vieja lucha de esta columna para que se cumpla la ley 85-99 creada en socorro de los Inmortales y Viejas Glorias… Pero, y aquí está el bendito pero, parece que el sábado amanecí más bruto que nunca, porque no entendí un decreto del presidente Abinader, cuyo artículo 3 no asimilo por más que he leído la pieza entera…
Un grupo de los “beneficiados” han celebrado ese decreto 377-22 y la prensa tituló “Presidente aumenta sueldos a Inmortales y Viejas Glorias”… Es verdad que un segmento está feliz, pero en otro hay murmullos, pesadumbre y la pregunta de “¿y qué abusador fue que asesoró tan mal al Presidente?”…
Y todo por el bendito artículo 3 que dice: “En el caso de los beneficiarios que se encuentren disfrutando de una pensión del Estado, estos podrán optar por la pensión que más les favorezca”… Presidente, un decreto no deroga una Ley y la 85-99 es bastante clara cuando ordena “5 salarios mínimos para los Inmortales y 3 para las Viejas Glorias”…
Lo que hay es que hacerla cumplir… Entre los que están celebrando hay muchos a quienes los 25 y 15 mil que les daban no les alcanzaban ni para las medicinas… Sin embargo, entre los tristes hay otros que trabajaron duro durante muchos años en una institución del Estado y los pensionaron…
Pero también fueron tan grandes en el deporte, que el Pabellón los inmortalizó… ¿Tienen ellos la culpa de que hayan hecho la ley “mal” y después de tanto tiempo con un nivel de vida decente tener que soltar uno, apretarse la correa y descender?…
Un decreto no deroga una ley, arréglenla para que diga “gratificación” en vez de “pensión”, o modifiquen ese artículo 3 del decreto del sábado… ¡Y haréis justicia!…