
SANTO DOMINGO.-El terror de los residentes en San Felipe de Villa Mella tras los hechos violentos registrados el pasado domingo, en el que tres personas murieron y otras cinco resultaron heridas, impusieron un “toque de queda” en esa comunidad, en la que fue suspendida la docencia en tres centros educativos y el comercio operó ayer de forma parcial.
La gran mayoría de los establecimientos comerciales permanecieron cerrados por el temor de los propietarios y dependientes de que puedan registrase enfrentamientos durante los funerales y sepelio de las víctimas.
Residentes en los sectores Vietnam y Mata de los Indios dijeron sentirse aterrorizados tras los enfrentamientos y la poca presencia policial, al punto de que muchos no asistieron a sus trabajos o no enviaron a sus hijos a la escuela.

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Joan Vargas
Joan Kennedy Vargas, periodista dominicano. Cubre la fuente de la Presidencia de la República, Policía, Fuerzas Armadas y DNCD.