En la noche del 2 de febrero de 1973, hace 47 años, un grupo de hombres tocó suelo dominicano.
Nueve hombres con una capacidad de entrega difícil de entender; con la valentía y el coraje de enfrentar a toda la maquinaria militar de un régimen despótico, opresivo y criminal.
Francisco Alberto Caamaño Deñó (Román), Heberto Geordano Lalane José (Eugenio), Mario Nelson Galán Durán (Juan), Alfredo Pérez Vargas (Armando), Ramón Euclides Holguín Marte (Braulio), Ramón Payero Ulloa (Ismael), Toribio Peña Jaqués (Felipe), Hamlet Hermann Pérez (Freddy) y Claudio Caamaño Grullón (Sergio). Cada uno con la capacidad de poner a su patria por delante de sus miedos.
La mayoría dejó sus vidas en las montañas, pero no fueron derrotados, ya que el objetivo de una guerra no es matar al enemigo, sino quebrantar su voluntad.
El presidente Caamaño dijo una vez: “el que tiene el derecho ya tiene la victoria, o la tendrá mañana por encima de las alternativas de la guerra, por encima del sacrifico y de la muerte”.
A los guerrilleros de Caamaño les arrancaron sus vidas, pero por encima de la muerte derrotaron al enemigo. Con su determinación demostraron tener más razón que sus contrarios. Caamaño frente al pelotón que le segaría la vida se sabía a sí mismo vencedor, pues no claudicó en sus principios.
Las guerras no siempre se ganan al ritmo que uno supone. La historia demostrará, como lo está haciendo, que los principios de Caamaño y de sus leales compañeros trascenderán y determinarán el futuro de nuestra nación.
Un día tendremos la Patria que ellos anhelaban, y entonces entenderemos que la lucha no es hasta la muerte, sino hasta la victoria.
Nota: Este domingo 2 de febrero, a las 11:00 a.m., serán los actos conmemorativos del desembarco de Playa Caracoles, en Playa Desembarco, Las Charcas, en la provincia de Azua.